Capitulo 11 »Miradas
- La puta madre - insultaba Kiara en su habitación
- Qué te pasa boluda? Que humor de mierda! - se quejaba Micaela
- Perdí mi blusa, no la tendrás vos, no?
- ¿Cual? ¿La negra?
- Si Micaela, donde mierda esta?
- Ahora te lado doy gila, calmate
- Uy dios, siempre robándome cosas chabona
- Bueno bueno, calmate, me vas a contar porque queres ponerte esa bella blusa? - puso cara de pervertida
- Nada, vamos a ir a almorzar con Ser
- Epa, es una cita?
- No tarada, yo te conté ya lo de él y Leo ¿que decís?
- No se, puede ser cornudo que se yo
Las muchachas siguieron hablando un rato más mientras se preparaban. Kiara para comer junto a su amigo, y Micaela para conquistar a Lavezzi.
Kiara se dirigió a la terraza, el Kun la había invitado allí
- Podías pagar un restaurante, no? Tanta plata al pedo - bromeo la chica
- Acá los Argentinos somos de barrio amiga, algún día te llevo a Inglaterra y te pago todos los lugares millos que quieras, acá somos así - contestó él
- Extrañas estar acá?
- Si, se extraña, allá es muy distinto, todo tiene que ser correcto viste
- Y por lo poco que te conozco lo correcto no va con vos - rió ella
- Mira vos decís que me conoces poco, pero aveces siento que me conoce más que muchos de los que están acá
- Más que Lio seguro no
- Meh, maso menos eh! No te confíes que él no se si me conoce tanto
- Pero que onda, ¿hay crisis matrimonial? - rió nuevamente
- Sos tarada eh! - se quejo chistoso - nah, esta todo tranqui, pero pensé que iba a ser distinto que se yo
- Banca, están de novios oficialmente?
- No, nunca pusimos un nombre a esto pero nos comportamos como
- Estúpidos - interrumpió
- Como te decía .. - sonrió - como si fuéramos novios
- ¿Y por que decís que lo creías distinto entonces?
- Que se yo, no es lo que había imaginado
La charla entre ambos siguió de lo más bien, lo único "raro" por así decirle fue cuando se saludaron, sus ojos se conectaron de una manera hermosa, como nunca antes lo habían hecho
Micaela estaba camino a buscar al pocho pero en el camino se encontró con Javier Mascherano sentado casi oculto en un rincón con su mirada ¿triste?, parecía perdido.. como si le hubieran arrebatado lo más anhelado por él..
- ¿Qué te paso?
- Nada nada - dijo el jefesito levantándose rápidamente
- ¿Problemas de amor?
- Algo así, no tantos como los tuyos igual
- No saltes a la defensiva, solo quiero ayudarte
- Me cuesta dejarme ayudar, me hace sentir débil. Anda, el pocho esta en la sala de juegos.
- ¿Que? No-no y-yo no iba, ¿como yo? nah! nada que ver boludo! no, para nada, no iba a buscarlo a él - era tan obvio su nerviosismo, que ni simulado una risa casi "carcajada" le creyó
- Tranquila, nunca banque mucho la relación del pocho y el pipa
Micaela se sonrojo y se dirigió a la sala de juegos, era claro que su único objetivo era estar con él
Lavezzi la vio llegar y disimuladamente se fue del lugar, sin embargo ella notó esto y lo siguió
- ¿Por que me evitas?
- Mira, te pido perdón si te lastime o lo que sea pero yo te veo solo como una amiga, yo quiero estar con Gonzalo le pese a quien le pese
- No te vengo a hacer una "escenita" ,no soy así. Tampoco vengo a echarte culpa de nada. Quería saber como estabas
- Bien, perfecto pero me tengo que ir
- Esta bien, si no queres que él te vea conmigo perfecto, igual te aviso que ya te esta fulminando con la mirada - fue lo ultimo que dijo y se fue de allí
Ezequiel se acercó a Gonzalo quien se quiso ir pero era claro que el más petiso tenía más fuerza y de un tirón lo atrajo hacia él
- Te puedo explicar
- No, no tenes nada que explicarme, no somos nada así que hace tu vida tranquilo - Gonzalo se mostraba fuerte aunque por dentro se estaba muriendo.
- Mi amor, yo te amo, y no quiero hacer una vida sin vos - Los ojos de Ezequiel podían transmitir tanto, se notaba el amor que tenía por Gonzalo.
Sus miradas se cruzaron con ese amor que no habían perdido para nada, sin embargo el más alto tenía que ser fuerte y resistir. No podía darle a entender que con una simple o quizás no tan simple pero en fin, con una mirada todo se arreglaría. Claro que esos ojitos le rompían el corazón pero tenía muy claro que así debían ser las cosas a partir de ahora.
- Lo hubieras pensado antes. - contestó Gonzalo y se alejo
Pero Ezequiel ya tenía un plan en mente, sabía que iba a recuperar a su novio, era el plan ideal, solo necesitaba un poco de ayuda.
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Ponele que secretos || Selección Argentina ✔
HumorDos mejores amigas, de 18 años, consiguen trabajo en el seleccionado de fútbol Argentino. Una como médica, la otra como "asistente" del director técnico. Ambas irán más allá de sus trabajos, buscando conocer cada vez un poco más a los jugadores, lo...