Capítulo 31

471 46 3
                                    

Alexia

Esa sorpresa que Mateo me había preparado era hermosa, habían globos y rosas por todos lados, una pancarta donde decía ¿Quieres ser mi novia? Incluyendo una torta donde decía que tenía dos opciones para decir sí sonreír y para negar la propuesta hacer un salto mortal. Sin duda era muy original y romántica, por lo que no pude evitar sonreír.

Mateo: ¿Eso quiere decir que si Mi Ángel?

Alexia: ¿Tú que crees? – Dije sonriendo

Mateo: Que si – Me agarra y me besa apasionadamente – Te amo Alexia Palacios – Dijo con su frente pegada a la mía

Alexia: Y yo a ti Mateo Sánchez, no sabes cuanto

Mateo: Ahora si somos oficialmente novios

Alexia: Si mi amor – Lo beso muy lento – Amo todo de ti, tus labios – Lo beso – Tu cara, todo

Mateo: Créeme que yo también aunque más tu sonrisa

Alexia: Te amo

Mateo: Yo también te amo – Dijo besándome – Tengo una cena preparada para ti ¿Quieres cenar?

Alexia: Si mi vida – Dije besándolo y abrazándolo

Mateo: Me encanta cuando eres así de cariñosa

Alexia: Siempre lo será mi vida, nunca pensé serlo pero te amo tanto que contigo lo hago porque me nace – Dije besándolo

Mateo: A mí también me pasa exactamente lo mismo Mi Ángel – Dijo sonriendo – Vamos a cenar que se nos va a enfriar la comida

Alexia: Está bien

Monserrat

Desde que hable con Ryan me siento triste, por momentos me moría por buscarlo y me arrepentía. Estaba muy confundida, son muchas emociones el día de hoy, me encuentro a Mateo y Alexia besándose, seguidamente me entero que mi ex novio y mejor amigo me sigue amando, son muchas emociones encontrabas, además de que me encuentro un collar que se me hace conocido de algún lado pero que no logro recordar.

Para dejar de pensar en lo otro, hago memoria de donde conozco yo este collar y no puedo hasta que me recuerdo de mi apartamento una vez que estaba con Mateo allí y entre su ropa encuentro un collar con la letra M. En ese momento pensé que en algún momento me lo daría a mí y con el pasar del tiempo no me lo dio. En realidad son exactamente iguales aunque ¿Por qué tiene una A y una M? Dios mío, este misterio tengo que resolverlo porque si no me voy a volver loca. Guardo el collar y voy a tomar un poco de aire cuando veo a Ryan con unas maletas.

Monserrat: ¿Te vas? – Dije dolida

Ryan: Si, por ahora me voy al pueblo y mañana temprano me voy a la cuidad

Monserrat: No es necesario que te vayas, yo no quise lastimarte

Ryan: No te preocupes, de todas manera pensaba irme – Dijo mirando al suelo

Monserrat: Ryan, no perdamos nuestra amistad

Ryan: Tranquila Monserrat, yo te sigo considerando como mi amiga. Por ahora solo quiero decirte que si no nos volvemos a ver

Monserrat: ¿Cómo así que no nos volvamos a ver? – Dije temerosa

Ryan: Es un decir, quiero que sepas que te amo y que nunca te olvidare – Dijo besándome la mejilla

Monserrat: Ryan, me asustas – Dije con los ojos llorosos

Ryan: Te amo Monserrat. Adiós mi pequeña

Mi otra mitadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora