Los guardianes elementales 2: la Nueva Esclava

capítulo 15: acepto, A todo o nada

Pov Tristan

Cuando me desperté con un fuerte dolor de cabeza, mi primer instinto fue colocar mi mano en ella pero adivinen que, no pude porque unas cadenas retenía mis manos. La ira volvió a mi Interior causando que comience a removerme entre mis ataduras con desesperación sin conseguir nada en absoluto. "Damian" pensé completamente molesto, el enojo que me invadía era incontrolable y no entendía porque, no entendía porque seguía luchando por alguien que bajo los brazos, porque insistía en cambiar a mi hermano, si él no quería cambiar, porque seguía a delante, si ya no quería avanzar. Miles de pensamientos se mezclaban en mi mente causando que siempre llegará al mismo lugar, a la resignación y la derrota.

-Despertaste, nos tenías a todos preocupados- dijo Tomás entrado a la habitación, que dicho sea de paso no le había prestado atención hasta ese momento, aunque no había nada que ver solo era una habitación vacía pintada en tonos pastel.

-Tomás ¿Cómo lo haces?- inquirí, a lo que él solo mostró un rostro confundido- Me refiero a como puedes seguir adelante...- aclaré, Él sonrío y se vino a sentar a mi lado.

-Tengo una razón para seguir- confesó.

-¿Serene?- Él asintió y yo suspire cansado- Diana es todo para mi...- explique.

-Pues tal vez allá algo más que pueda distraerte- intento convencerme.

-¿Como qué Tomás? Diana y mi hermano son todo lo que tenia, de verdad que estoy perdido sin ellos- explique cabizbajo.

-Sera cuestión de encontrar algo más- trató de apoyarme, yo lo mire con resignación.

-Puedes soltarme- rogué, él me estudio para finalmente decir.

-¿Qué harás?- indago.

-Tomás... necesito verla una vez más, solo...- traté de pedir pero él me interrumpió.

-Ya no sigas por favor, ¿sabes? a veces desearía entender porque tienes esa necesidad inútil de verla una y otra vez sabiendo que no puedes tenerla...- confesó cansado.

-Tal vez, le gane por cansancio al destino- me burle de mi mismo.

-¿No estas cansado?- pregunto Tomás.

-Un poco pero no tengo ninguna otra razón por la que estar aquí...- explique y al instante otro deseo cruzo mi mente- me gustaría ver a mi padre- confesé sin entender porque quería tal cosa, Tomás se paro y con una llave que saco de su pantalón me quito las cadenas, dejándome confundido.

-Sabes las cadenas no sirven de nada, se que Diana no quiere que hagamos nada pero creo que tu necesitas hacerlo. Y no soy quien para detenerte. Pero eso si, si mi hermana pregunta trate de detenerte, tal vez tu la quieras molestar pero yo no lo deseo- pidió al final.

-Gracias Tomás- agradecí mientras me ponía de pie.

-Te estoy mandando a una muerte segura, no se si deberías agradecer eso- reconoció.