capítulo 9: Fuera de lugar

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POV Tomás

Era tan lindo tener a Serene entre mis brazos como había llegado a este mundo.
No quise desquitar mi frustración con ella, pero ya estaba harto de que todos creyeran que a mi no me dolía lo de mi hermana pero se que esto es lo que desearía ella.

Estaba con Serene en un silencio  muy cómodo disfrutando de la presencia el uno del otro Hasta que el silencio se corto por el sonido de mi celular, gracias a los dioses estaba en la mesa de luz y pude tomarlo sin necesidad de molestar a Serene, cuando atendí.
-Hola- hable. Bajo su mirada atenta.
-TOMÁS QUE MIERDA LE PASO A DIANA- me grito la persona al otro lado.
-¿Quien es?- pregunte tratando de no gritarle.
-Damian- contestó seco- ¿Donde esta Diana, Tomás?- Inquirió.
-¿De donde sacaste mi número?- inquirí.
-Pregunte primero ¿Donde esta mi reina?- ingado molesto.
-No lo - afirme. Estaba por decir algo más pero golpearon a la puerta.
-Princesa ¿esta ahí?- inquirió alguien del otro lado de la puerta.
-¿Qué sucede?- pregunto ella mientras saltaba de la cama y se cambiaba.
-Está su padrino aquí- informó.
-Iré enseguida- aviso luego vino hasta mi ya cambiada- debo irme, te prometo que seré rápida esperame me debes un par de respuesta- dijo pasando su mano por mi torso aún desnudo y luego se fue dejando un pequeño beso en mi mejilla.
-¿Así que estas con la princesa?- indago divertido lo cual nunca era bueno.
-¿Qué mierda quieres Damian?- grite mientras me cambiaba.
-Saber donde esta Diana y que le paso- me informo.
-¿Cómo sabes que le paso algo?
-No te lo diré... sólo lo se ahora  responde si no quieres que le de algunas respuestas a TU  princesita- me amenazó.
-¿Me estas amenazando?- inquirí molesto.
-Si, ¿algún problema? tu y yo sabes que cumplo muy bien mis promesas ¿recuerdas a la cabra o tengo que recordartelo?- me recordó con diversión, lo que me hizo estremecer.
-Bien te lo diré pero no hagas una estupidez por que si se llega a enterar me matará- informe cansado.
-No te preocupes por mis acciones.
- Está con Nicolás...-dije cansado.
-¿Él hermano mayor de Tristán... el señor de la oscuridad?- indagó preocupado.
- Si, el mismo.
-Esto quiere decir...- comenzó a deducir pero lo interrumpí.
-Si, ella agotó el poder de la oscuridad y esta pagando el precio, Damian no hagas ninguna estupidez- informe.
-No te preocupes se que no es lo que Diana quería- dijo antes de cortar. Y sin nada más que hacer me volví a acostar en la cama de Serene.

Pov Diana

Me estaba divirtiendo demaciado jugando con los traidores, hasta que a mi señor le pareció que ya tenía suficiente diversión así que hice desaparecer la espada y salte para llegar a su lado. Él me esperaba con una gran sonrisa de satisfacción en su rostro.
-¿Así te gusta más?- a lo que asentí con una sonrisa- Bien ahora vamos a tu habitación para que te quites toda esa sangre.
Me volvió a guiar hasta la habitación y estaba por entrar en el baño cuando él me abrazó por detrás impidiendo que me alejara.
-¿A donde crees que vas?- Inquirió con molestia.
-A bañarme- respondí con indiferencia.
- Aún no- afirmo. Para quitarme el vestido rápidamente y llevarme a la cama, se colocó sobre mi mientras lamía los restos de sangre en mi cuello hasta llegar a mis labios y besarlos con gran intensidad.
-Amo...- trate de decir separandome de él, Causando que se molestará un poco.
-Diana...- dijo con furia pero en un susurro, mientras colocaba mis manos a los lados de mi cabeza- no te habían dicho que callada te vez más bonita- lo mire enojada pero él ignoro mi expresión clavando sus colmillos en mi vientre causando que soltara un grito de dolor mientras él aun sosteniendo mis muñecas- Diana calla- ordenó retirando sus dientes estaba enojada muy enojada con él en ese instante - ¿Diana se te a olvidado tu lugar?- inquirió desafiante yo negué pero él no pareció convencido, volvió a clavar sus colmillos esta vez en mi cintura ahogue un grito pero deje ver una notable mueca de dolor-¿Diana has olvidado tu lugar?- volvió a preguntar con sus colmillos a la vista y muy cerca de la piel de mi busto.
- No amo- respondí con frialdad. Él sonrió.
-Espero que te quede claro- dijo antes de morder unos segundos mi cuello-Bañate volveré luego- ordenó antes de irse. Suspire antes de salir de la cama e ir al baño.
El agua de la bañera me relajo bastante y me ayudó a quitar los restos de sangre reseca en mi cuerpo. Cuando salí me seque y cambie colocandome una remera gris mangas larga y y unas calsas negras con medias negras sin zapatos tome el cepillo del baño y salí al balcón sentandome en una silla comencé a peinar mi cabello húmedo hundida en mis pensamientos hasta que una voz me saco de ellos.
-Diana mi amor- dijo él hermano de Nicolas detrás de mi, deje el cepillo y me diriji hasta él.
-¿Qué haces aquí?- inquirí tratando de mantenerme firme pero me era imposible si quiera mirar sus ojos sin titubear.
-¿Sabes quien soy?- pregunto con ilusión yo asentí y pareció iluminarsele el rostro.
-El hermano de Nicolás- agrege rápidamente y toda su felicidad se esfumo como llegó en un segundo-¿Qué haces aquí?- inquirí él no contesto hice aparecer una espada y lo acorrale contra la pared con la espada en su garganta y con muchas intención de matarlo, al parecer él lo noto porque dijo.
-Diana, ¿Qué haces?- yo solo me lo quede mirando fijamente unos segundos y cuando estaba metiendo la presión justa para acabarlo él me saco de encima para cambiar de lugar- Diana soy yo....- dijo con voz quebrada ocultando un gran dolor.
-Sueltame- ordené pero él no me presto atención parecía completamente confundido por mis acciones. Levante mi brazo con dificultad y le hice un tajo profundo en su costado, él ahogo un grito que era entre dolor y sorpresa e iba a decir algo pero se escucharon unos golpes en la puerta me gire a ver esta y cuando quise volver a mirar al chico ya no estaba. Suspire frustrada hice desaparecer la espada y camine a la puerta para encontrarme con una sirvienta.
-Quiere verte YA- me informo remarcando la ultima palabra yo asentí- esta en su trono yo la guíare- cerré la puerta y comencé a seguirla cuando llegamos a la puerta ella se fue y yo entre las puertas se cerraron detrás de mi. Él estaba sentado en su trono muy, muy furioso, bajo de él al verme camino hasta mi y cuando estuvo enfrente me tomo del pelo con fuerza y me obligó a arrodillarme, una mueca de dolor recorrió mi rostro.
-Diana ¿Qué crees que estabas asiendo?- inquirió confirmandome lo que su rostro decía. No dije nada porque en primer lugar no sabia de que hablaba y en segundo porque solo conseguiría complicar más mí situación- ¿Qué mierda hacías con mi hermano?- indago hecho una furia.
-No hice nada- dije en un susurro mientras trataba de ocultar mis gritos de dolor.
-Quiero que te alejes de él- me ordenó sin soltar su agarré- ¿Entiendes?- yo asentí- Diana ¿Entiendes?
-Si amo- respondí cuando lágrimas comenzaban a caer de mis ojos, el dolor de su agarre estaba recorriendo todo mi cuerpo.
-No quiero que vuelvas a empuñar tu espada sin mi consentimiento ¿entiendes?- estaba muy molesto y no era muy difícil de deducir.
-Si amo, como ordene- respondí con rapidez. Él soltó mi cabello tirandolo adelante y por ende todo mi cuerpo fue en la misma dirección antes de que mi rostro choque con el piso logre colocar mis manos frenando mi cabeza.
-Espero no tener que repetirlo...-Yo asentí ya no confiando en ninguno de mis sentidos, todo mi cuerpo me dolía- Guardias- ordeno dos se apresuraron a entrar- llevenla a su cuarto y que no salga de allí- ellos asintieron y me tomaron por los brazo - Diana no quiero que salgas de la habitación y eso quiere decir que nada de ir al balcón- yo asentí.
-Cómo usted ordene- respondí, él movió su mano y los guardias me llevaron a la habitación sin hablar. Cuando llegaron me lanzaron dentro y se fueron corrí al baño y abrí la ducha me metí sin sacarme nada pues ese no era mi propósito. Lágrimas comenzaron a caer de mis ojos sin parar. Tenia miedo y si, estaba asustada, confundida y vacía era como si algo me faltara algo muy grande y sabía lo que era... me faltaba mi pasado, Mi vida, MI verdadero yo.
Pero no quería recuperarlo más bien deseaba enterrarlo tenía que pagar por esa vida y lo haría costará lo que costará pagaría mi deuda.

GENTE HERMOSA QUE LEE ESTA PEQUEÑA HISTORIA PREFERENTEMENTE NO ME MATEN.

Sobre todo tu mi amor Asalea123

Los guardianes elementales 2:  la Nueva Esclava Donde viven las historias. Descúbrelo ahora