Idealista - Por Un Mundo SIN PERSONAS

Hijo completamente único

Me considero una persona tranquila en cuanto a pleitos, peleas, discusiones o cosas parecidas. Prácticamente no suelo enojarme fácilmente, no me siento ofendido fácilmente, no me siento traicionado fácilmente, pues tengo una coraza contra aquellos males de la indiferencia, la antipatía, la arrogancia, soberbia, envidia, etc.

Pero hoy, después de muchos años, volví a tener la conversación que me destroza el alma por completo de rabia.

Una amiga que conocí hace algunas semanas me pregunto si tenía hermanos, al contestarle yo que no tenía, ella dijo las palabras que no me tienen que pronunciar nunca, ella dijo:

- "Ahhh, por eso."

¿Por eso? Por eso. ¡¿Por eso?!

¿Qué me quiere decir el mundo con eso? ¿Qué tengo traumas psicológicos a causa de no tener un hermano o hermana? ¿Qué estoy loco por nunca haber tenido a un hermano o hermana?

Primero, yo no tengo la culpa de ser hijo único. Si, si, ¡Sí! Si dependiera de mí (por qué la siguiente pregunta es: ¿Y no te hubiera gustado tener hermanitos?) si realmente dependiera de mi tendría no un hermano, sino miles. Negros, chinos, ruso, mejor rusa, peruano, boliviano, no ese no, pero lo que sea. Vengan a mí, por favor hermanos míos, con sus traumas y torpezas, destrocen todo, yo no me complico.

Segundo, el que haya tenido amigos imaginarios no quiere decir que aun los mantenga, bueno ellos crecieron como yo, y conocieron algunas otros amigos imaginarios de otros hijos únicos y, ya saben, formaron familia. No los extraño la verdad, aunque con nostalgia suelo pensar aquellos momentos inolvidables donde entre todos mis amigos imaginarios jugábamos a la pelota, pero yo por ser malo siempre me ponían al arco, pero igualmente los extraño y comprendo que ellos hayan tenido más suerte que yo en el amor.

Tercero y último, el que yo sea hijo único no supone que sea negativo. El ser hijo único ha fomentado mi creatividad al máximo, aunque aun no tenga como demostrarlo. El ser hijo único me ha permitido desarrollar el talento de escribir, aunque aun no haya publicado ningún libro. El ser hijo único me ha permitido ser demasiado sociable, aunque aun no tenga ni un solo amigo. También, el ser hijo único me ha ayudado a planificar bien mis días, aunque no anote nada y me la pase comiendo y durmiendo. En fin, el ser hijo único no es malo, sino, no es tan bueno.

No me vengan a decir personas que tienen hermanos que me entienden, NO, este es un llamado de la selva a los hijos de la soledad, que viven en las cuevas de lo imaginario y que esperan encontrar su alma gemela, que por nuestro bien futuro, ojala sea hija única también.

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