04. Madres cansadas y novios.

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Se encontraba sentado en el sillón buscando algo interesante en la televisión, pasaba una y otra vez los mismos canales pero nada llamaba su atención, hace un par de horas Isabella ya se había ido y era difícil olvidar lo que había pasado en la noche.

Había besado a su mejor amiga, eso no estaba bien, no solo porque eso no era parte de una relación de amigos sino porque el era gay y tenía novio.

—Solo fue un beso —dijo para si mismo—. Ella no lo recuerda y no lo recordará.

Sus pensamientos respecto a la castaña se vieron interrumpidos por el sonido del timbre, gruño ya que prefería quedarse acostado en el sofá.

—¡Mamá, el timbre! —chilló esperando que ella abra la puerta.

—¡Tengo flojera, ve tú! —escuchó que gritaba su madre.

—¡Estoy cansado! —protestó.

—¡Yo estaba cansada cuando naciste pero igual te alimente! —contraatacó.

—¡Está bien! —gritó parándose—. ¡Tú ganas!

Se dirigió a la puerta quejándose, el mueble era muy cómodo.

—¡Harry! —exclamó Louis tan pronto el ruloso abrió la puerta.

Ambos se dieron un gran abrazo felices de estar juntos, una de las cosas que Harry más apreciaba en la vida era pasar tiempo con su novio.

—¡Llegaste de tu viaje familiar —dijo cuando finalmente se separaron.

—Así es —afirmó mientras pasaba a la casa de Harry—. Extrañaba estar aquí, sobre todo estar contigo.

Louis se acercó y le dio un suave y corto beso a Harry.

—Es tierno que tengas que ponerte de puntillas para besarme —bromeó.

—No al bullying, Harry —chilló Louis y su novio rió.

Ambos se dieron y par de abrazos y besos hasta que la voz de la madre de Harry los interrumpió.

—¡Harry! ¡¿quién es?! —gritó su madre desde arriba, ambos rieron debido al brinco que pegaron por el susto.

—¡Es Louis! —respondió.

—¡Hola Louis! —saludó la madre de Harry.

—¡Hola señora Anne! —gritó Louis—. ¿Por qué tu madre no baja?

Harry se encogió de hombros y le volvió a dar un tierno abrazo a Louis.

—¿Recuerdas cuando tú eras más alto que yo? —preguntó Harry enternecido.

Louis rió y le dio un beso de pico a su novio.

—Que triste que eso no duro mucho.

—Igual te amo, bobo —rió Harry—. ¿Cómo te fue en el viaje familiar?

— Pues ya sabes; lo mismo de siempre —respondió acariciando el pelo de Harry—. Mis padres con sus canciones en el camino, una de mis hermanas estaba en sus días así que termine gravemente moretoneado, un millón de mosquitos se alimentaron de mi sangre.

—Eso suena mal... —dice Harry.

—Lo fue —suspiró recordando—. ¿Qué tal la fiesta?

—Pues descubrí que mi cabeza parece la de un gatito —admitió y Louis soltó una gran carcajada—. Pues un viejo loco nos corrió con una pistola pero excluyendo eso fue muy divertido.

—¿Una pistola? —dijo sorprendido y Harry asintió—. ¿Nadie salió herido?

—Por suerte no pero Isabella casi logra que nos maten —chilló.

—Pues si yo hubiera ido tu nivel de diversión hubiera aumentado notoriamente.

—Si tú lo dices.

Los recuerdos volvieron a la cabeza de Harry, él solo quería sacar aquel beso de cabeza pero por arte de magia volvían y no parecían querer irse.

—¿Me das refresco? —preguntó Louis—. Es que tengo sed.

—Refres... ¿qué? —balbuceó el ruloso.

—Ya sabes, refresco; esa cosa líquida que la gente bebe y por una extraña razón es un vicio —respondió—. Sabes mejor voy yo a buscarlo.

Louis se dirigió a la cocina con Harry detrás de él, el silencio había inundado el lugar.

—No entiendo como puedes ser tan lento —se burló.

—Ya sabes, cosas típicas de mí —admitió—. Si Harry no es lento no es Harry.

—Buena frase, podrías escribir un libro —bromeó para después darle un sorbo a la lata de refresco.

Harry y Louis tenían dos años de noviazgo, ambos eran muy felices, el ruloso aún recuerda el día que se le confesó a el oji-azul, estaba tan nervioso e inseguro, Isabella lo había apoyado de todas las maneras posibles y él se mostró muy agradecido.

Cuando se le confesó a Louis nunca se imagino que le correspondería los sentimientos, todos sabían que los dos eran gay pero nadie se imagino que terminarían juntos.

Las que se mostraron más felices fueron Anne (la madre de Harry) y Gemma (su hermana) quienes aceptaron felices la sexualidad del ruloso y lo apoyaron tal como lo hizo Isabella.

¿Enamorada De Un Gay? 》h.s. 》l.s.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora