- Capítulo 15 -

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Elevé mi mano a mis ojos, en un reflejo protector hacia ellos, me molestaba  la luz blanca penetrante se ne estaban incrustando a los ellos, no entendía nada, no recordaba a nada más que las súplicas de mi compañero y un terrible dolor, seguí avanzando con dificultad a la única dirección que mi cerebro llegaba a captar, seguí adelante pasando por aquella luz cegadora en una caminata sin descanso. El cuerpo no me dolía, la vista no me dolía pese a que aquella terrible luz podría dejar ciego incluso a un uchija.
De repente la luz se disipó y en lugar de un lugar blanco y luminoso como me había llegado a imaginar era oscuro, para ser más específico era de noche, estaba en el bosque los alrededores de konoha, había una fogata y una tienda de campaña, y de repente la vi, se encontraba de espaldas a mi sentada alredor de aquella fogata, su cabello azul casi negro caía liso sobre sus hombros  perfectamente peinado, y de repente se giró y sus enormes ojos zafiros se clavaron en mi, los tenía como siempre, tan claros.. tan perfectos... yo me encontraba paralizada viendo las perfecto tas facciones de mi hermana tan exactas y fascinantes como aquel día en el qie fue el último.
Y de repente lo vi claro, esto era un sueño, tenía que serlo. Mi cerebro mando una descarga eléctrica a mi cuerpo paralizando indicándole que se moviera de una vez por todas. Y asi lo hizo , casi por arte de magia conseguí mover las piernas y sentarme justo al lado de mi hermana, y como si se tratara de la mismísima medusa novio capaz de mirarle a los ojos, posando los líos en las llamas.

- Sora...- eso so no más a pregunta que a una afirmación- ¿qué haces tan pronto aquí?

- Miiko...- ahora si la mire- ¿como que qué hago aquí? Es mi sueño

- Sora...es... esto no es un sueño..- le costó decirme la verdad podía notar en como lo habia contado- este es el sitio al que irás cuando mueras... oh pero no te asustes no estás muerta... sólo inconsciente.. ves! - cogió mis manos y me las mostró, estas estaban perfectas las heridas, sangre en incluso sudor que recordaba que tenía había desaparecido por completo, pero a través de mis manos podía ver el césped.
Mi cuerpo era casi transparente, como si mis manos estuvieran culpidas en cristal.

- ¿Qué a pasado pequeño gatito?- Miiko me despeino mi cabeza y sonrió de lado, tenía ganas de llorar.. no me habia dado cuenta de como había añorado sus gestos y a ella misma..

- Pues... es una estupidez...

- No creo que tengamos mucho tiempo gatita.

- Verás...- le conté la misión que estaba teniendo y sin saltarme los talles de como habia llegado ahí, aunque no entendia el por que estaba alli realmente, mi hermana se mordía la uña del pulgar, siempre hacia eso cuando estaba concentrada.

- ¿Entonces estas aquí por amor? Gatita has crecido mucho.

- No estoy enamorada- bufé, no lo estaba y menos de bakakashi ese idiota no me podía gustar ni en un millón de años.

- Pero sigues siendo testaruda- las dos reímos, sabía que era verdad. De repente se hizo un silencio

- Te echo de menos... no te puedes imaginar cuanto....- me eche a los brazos de mi hermana abrazándola impregnándole de su olor y recordando cada rincón de su cuerpo...

- Sora lo siento... no debí dejarte sola...

- No es culpa tuya Miiko... nunca he pensado que haya sido culpa tuya que te vayas...- dicho esto una fuerza me arranco de los brazos de mi hermana empujándole de nuevo a la luz blanca - adiós Miiko - me despedí con una sonrisa a mi hermana, esta me la devolvió, aquella fuerza siguió tirando de mi y de repente estaba en una cama, tenía los ojos cerrados y escuchaba unas voces.

- No sabemos si despertara, lleva así una semana, fue un exceso de chakra, bastante excesivo, lo hemos intentado todo chico... lo siento pero no sabemos cuánto durará este estado- intenta abrir los ojos pero no podía, estos estaban cerrados como si tuvieran pegamento, intenta moverme hacerles saber que los estaba escuchando pero no podía, que coño me pasa...- no sabemos si tu novia durará mucho más en este estado..

- No es mi novia... ella... ella está así por mi culpa- dijo Kakashi... ¿Kakashi esta aquí? ¿Que hace ese estirado aquí?

- Lo siento chico...- la mujer se marchó lo supe por el tintineo de sus tacones por el piso.

- ¿Por qué eres tan impulsiva?... si te hubieras quedado quieta... esto no hubiera pasado... tu... tu estarías bien.

Pero tu no

Era inutil mi cuerpo aún no respondía a mis señales.

- Te echo de menos... a veces pienso que me escuchas...

Lo hago

- Y otras que estoy loco, como me vas a escuchar si estas en ese estado..

Lo estas, pero te escucho

Kakashi siguió hablandome de vez en cuando toda la tarde, me leía un libro bastante divertido, pero luego llegó la noche, yo no estaba cansada pero él si... no se fue pues estuve escuchando sus ronquidos por horas, me aburría, intentaba mover mi cuerpo y este no respondía, ni un gesto ni una articulación ni siquiera un leve parpadeo, nada.. pero yo no soy de las que se rinden y seguí, seguí hasta que pude mover mi dedo y pese a eso seguí, yo no me limito a nada, llegue a ser la mejor kunoichi de mi clan con solo 8 años sin siquiera dar una patada certera a los 7. Yo tenía que moverme, tenía que gritarle a ese baka que se fuera a su casa a roncar allí, que durmiera, que estar pegado a mi cama no era vida. Tenía que decirle que él vale más que nadie y que yo solo era un peón, que si tenía que morir para salvar a la persona mas " insignificante" del mundo, moriría por ella... por él... y que nada podía hacerme más feliz. Poco a poco empecé a mover casi todos los dedos, y más tarde la muñeca. Seguí y proseguí, otro día paso y Kakashi sólo se había despegado de mi las escasas veces que necesitaba y por lo que veía procuraba que fueran las menos posibles y menor tiempo, me hablaba y repetía la misma acción una y otra vez la de los días siguientes, esa doctora entraba negándole a Kakashi que habia mejoras. Yo intentaba mover mi mano para que se dieran cuenta pero a mi parecer ellos se encontraban al otro lado y me cansaba bastante hacerlo. Pasaron días eternos para mi, días que se me antojaban siglos, hasta que por fin conseguí abrir los ojos, mi cuerpo por fin habia reaccionado a mis llamadas, conseguí levantar medio cuerpo y medio abrir los ojos , por suerte para mi era de noche y no me molestaban gracias a la oscuridad, me dolía la cabeza y sentía mi cuerpo aun entumecido, tenía un tubo que me daba oxígeno en la nariz, me lo quite y al instante deje de sentir ese aire tan artificial, me volví a sentir algo mad viva, sentía un pinzado en mi muñeca gracias a una aguja que tenia clavada ahí, me quite el goteo, y por último me quite un aparato que rodeaba mi dedo, al hacerlo este hizo un sonido muy agudo provocando (aparte de que me terminara de estalla la cabeza) que Kakashi se levantará de un salto y se me quedara mirando con asombro, yo lo mire confundida y aturdida aún por lo ocurrido. Kakashi en un rápido movimiento cogió mi cara y con rapidez junto nuestros labios, yo seguía con los ojos abiertos aún sin entender lo que acababa de pasar, Kakashi movió sus labios y yo le seguí el juego en un beso suave y delicado, escuchamos la puerta a abrirse y una pequeña risa en ella, Kakashi y yo nos separamos aún con la respiración agitada y una sonrisa tímida en los labios y giramos la cabeza a la puerta encontrándonos con una enfermera que le acababa de guiñar un ojo a Kakashi haciendo que este se pudiera rojo.

- etto... me deje llevar... por la emoción del momento...- dijo Kakashi intentando ocultar el rojo de sus mejillas tras la máscara, aunque no.. no lo había logrado... puede que yo tampoco...

Te espero en mi ventana //fanfic Kakashi// |Naruto|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora