Soraya
Sentí unos gritos por el pasillo, instintivamente miré por la puerta y ahí estaba él. Un Michael completamente revolucionado gritaba cosas con sus amigos.
—Chicas vengan a nosotros —Gritó Luke
—Vamos nenas —No entiendo porque me sorprendió que Cristóbal gritara eso, es obvio que lo hace para disimular
—Seremos unos desquiciados, pero jamás unos capullos —Sonreí al escuchar a Michael decir algo tan ¿logico?
Continuaron avanzando a quién sabe donde llamando a mujeres.
Recargue mi cabeza en la puerta y me coloqué a pensar en lo que había pasado esa noche. La vergüenza subía a mis mejillas y hacía que mi cuerpo se revolucionara por completo. Sólo el me hacía sentir de esa manera, y lo peor de todo era gay. Sentía unas enormes ganas de llorar, pero debía ser fuerte. Era algo que yo misma me había buscado.
—¡Por dios! ¿pero que haces ahí? M-u-e-v-e-t-e —Hice mi cuerpo a un lado, y Sabrina sonrío con burla y pasó junto a sus amigas.
[..]
—¡Ptsss! Soraya —Miré a todos lados y enfoque mi mirada en Michael, quién hablaba desde el cuarto de mi tío, la bodega.
—¿Que? —Dije cuando ingrese y ya había cerrado la puerta
—Hola —Antes que pudiera procesar sus labios estaban sobre los míos, parpadee algunas veces y el se alejo —Necesito que después de clases me esperes, quiero que me acompañes a una peluquería
—¿Y porque no vas con tu novio? —Michael se mordió un labio
—Porque para eso tengo a una esclava —Me lanzo un beso y caminó hasta la puerta —Tenemos un trato, querida
Esa tarde llego muy pronto. Sólo parecía que habían pasado segundo desde que Michael Clifford me beso.
Lo esperé recargada frente a su salón, al sonar el timbre salió junto a su novio, claramente se hacían pasar por amigos. Me coloqué nerviosa y algo celosa, sobre todo cuando ambos se acercaron a mi.
—Cristóbal piensa que tenemos algo. ¿Cierto que no, Soraya? Sólo iremos a estudiar —Dijo despacio para que sólo nosotros oyeramos
—Si —Había sonado muy convencional, Cristóbal suspiro
—No te creas mucho niña. Celos de ti no tengo, sólo desconfio de esta perra —Miro con burla a Michael y le tendio la mano para despedirse. Michael la acepto con una sonrisa, y lo abrazo para darle algunas palmadas en la espalda, le susurró algo al oído que no escuche. —Adiós Soraya
—Bye —Me quedé en silencio viéndolo desaparecer por el pasillo, Michael tenía su mirada fija en mi
—¿Sólo hablas monosílabas?
—No —Soltamos una pequeña risa y luego paso su brazo por encima de mis hombros
—La peluquería podrá esperar unos momentos. Ven aquí —Empujo mi cuerpo contra la bodega, que era testigo de muchas cosas. Me sentí culpable porque aquí venía el y su novio. —¿En que piensas? —Cerró la puerta con seguro y caminó hasta mi
—En nada —Sonreimos. Pasó su brazo por detrás de mi cintura y me beso los labios sólo unos segundos, tiró de mi labio inferior y bajo su mano hasta mi trasero. Se separó para quitarme la blusa y comenzar atacar mi cuello, gemi porque era una sensación únicamente agradable, el cuerpo de Michael se tenso y se alejó un poco.
—Quiero que hagas una cosa Soraya. —Dijo con la voz completamente cortada —Quiero que me digas Daddy cada vez que estemos juntos. Claro, no delante de Cristóbal ¿entendido?
—Si
—¿Si que? —Mis mejillas se tiñeron de rojo, no podía creer que me estuviera haciendo esto
—Si Daddy —Sonrío con dulzura y me tomó la nariz entre sus dedos
—¿Quieres tu nariz? —Dijo señalando su dedo gordo entre sus otros dos dedos
—Si.. Daddy —Me tomó del cabello y me apego contra la pared. Me beso bruscamente, y su lengua comenzó a buscar la mía, sin saber que hacer sólo pude seguirle el juego, coloqué mis manos detrás de su cuello.
Su brazo bajó por mi espalda y enseguida yo ya estaba sobre el, con mis piernas enredadas en su cadera, me acomodó aún más y con sus dos brazos sosteniendo mis piernas comenzó hacer un vaivén. Me elevaba hasta su cadera, y luego me dejaba caer de forma bruta sobre su pantalón, haciéndome sentir algo duro en mí.
—Michael —Dije con deseo —El comenzó hacerlo más fuerte y mi espalda recaía contra la pared —Daddy... —Gemi fuerte cuando sentí con mejor claridad algo entre mis piernas. Sólo que aún teníamos la ropa puesta.
—¿Quieres más? —Susurró contra mis labios
—Si —Me dio una fuerte "clavada" y se detuvo
—¿Si que? —Cerré los ojos mientras me movia inquieta
—Si daddy, por favor —Dejo mi cuerpo en el suelo y lo miré confundida
—Colocate en cuatro —Ordenó. Obedeci en el mismo instante, no entendía cual era su idea, pero luego lo sentí detrás de mi, levanto mi falda y sentí cómo desabrocha su cremallera del pantalón. Cuando pensé que me follaria y me asuste, lo sentí frotarse contra mi. Gemi y me empujo, haciendo que me cayera —Apoya los brazos en el suelo y coloca tu cabeza sobre esta, que tu trasero quedé elevado —Hice lo que me ordenó y pasó su mano por mi cadera y luego la sentí sobre mi zona.
Comenzó a moverse, delante, atrás, delante, fuerte. Despacio. Su mano me apretaba con firmeza, mientras gemia mi nombre, sentí qué mi cuerpo estaba a punto de desmayarse y poco a poco nos detuvimos. Completamente cansados.
—Ha sido un placer. Esto continuará. Pero no hoy —Me coloqué mi blusa y asentí —Estas tan.. Buena
—Tu.. Tú.. Tambien —Me sonrio y me dio un pequeño beso.
......
—Esta cerrado. Maldición —Me mordi la uña con frustración.
—Lo siento.
—No.. No pidas disculpas cielo —Me abrazó con fuerza—Volveremos otro día. Déjame llevarte a casa.
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Esclava sexual de un gay (Michael Clifford) EDITANDO
FanfictionTenía los ojos cerrados y la cabeza hacía atrás, expulsó el humo de su cigarrillo viéndose tan jodidamente sexy. -¿Te gusta lo que ves? -Dijo sin mirarme -No estoy mirandote -Mentí -No te confundas, soy gay -Abrió sus ojos que estaban rojos y tomó...