Mi experiencia paranormal

18 3 4
                                    

Hola guap@s ¿cómo están? Bueno no haré mucho preámbulo y empezaré a contar mi experiencia paranormal a pedido de una de las lectoras de "Ser zorra no es fácil".

Bien, todo comenzó hace unos 10 años atrás, sí, hay que rebobinar bastante. Yo juraba tener una amiga imaginaria llamada Brenda, hasta ahí, todo normal ¿qué niño no tiene amigos imaginarios? Bueno, hay varios pero yo era del otro grupo. 

Pasado unos meses de decirle a todo el mundo sobre mi amiga imaginaria me comenzó a dar miedo, no recuerdo bien porque era muy chica, pero recuerdo la sensación de no querer estar sola ni en mi cuarto. También, yo le decía a mis padres, y de esto si me acuerdo bien, de que ella dormía conmigo todas las noches, a los pies de mi cama.

(Esto se está poniendo feo, estoy sola en mi cuarto y con las luces apagadas jaja)

Luego de ahí todo normal, pasaron años sin que nada raro me sucediera..hasta hace dos años.

Yo seguía en la misma habitación y cada vez que dormía escuchaba ruidos raros, como a silbidos o así. Todavía no me preocupaba, solo cerraba los ojos y seguía durmiendo.

Luego, un día al despertarme descubro que tenía todas las piernas y brazos rasguñados e intenté buscarle el lado realista pero aunque no se lo encontraba, lo dejé estar. Fueron muchas los días que amanecía con cortes o rasguños así que le avisé a mi madre. 

Ella prácticamente no dijo nada así que tuve que seguir haciendo como que no pasaba nada. 

Un día, yo estando en el living escucho un golpe proveniente de mi cuarto y cuando me asomo a ver que se había caído, vi que estaba la luz prendida pero no había nada en el suelo ni nada parecía fuera de lugar y para colmo mi madre estaba durmiendo.

Pero lo que sí fue el detonante de no querer volver a pisar mi cuarto, literalmente, fue que yo tenía un peluche que cuando lo apretabas con fuerza sonaba. Eso sí, habia que proporcionarle bastante fuerza para que suene. Y muchas veces, estando lejos de mi cuarto se escuchaba como sonaba, como si estuvie trabado y yo tenía ue ir y practicamente golpearlo para que deje de hacer ruido.

Luego de todas esas cosas, me mudé y gracias a Dios, no me ha vuelto a pasar nada de eso.

Bueno esa fue mi historia y la que quise compartir con ustedes. Gracias a la que se la dediqué por darme la idea.

Pueden dejar otra pregunta o tema para hablar aquí o en mi último capítulo (en la nota de autora) de Ser zorra no es fácil. 

Recuerden que tengo mente abierta.

Gracias por tomarse el tiempo de leer, votar y comentar. L@s amo.

Muack :*

Blog |Mira y aprende|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora