17-Cenas divertidas

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Tobias

La llevé a casa en el coche de mi hermano. Que Paul estuviese de nuevo en casa no debía ser nada bueno. Siempre había querido mucho a mi hermano...hasta que empezó a gustarle lo mismo que a mi. Siempre había sido el más listo de los dos, el más amado por mi padre y el que más suerte tenia, pero al parecer, aquello para él no bastaba. Que estuviera con Skyler y apareciera él de repente solo me demostraba mi mala suerte. No me podía fiar de Paul.

Noté la mano de la rubia sobre mi pierna y me giré a verla mientras había un semáforo en rojo. Mostraba unos ojos tristes que me preguntaban el por qué estaba molesto. Durante todo el viaje a su casa había estado dándole vueltas al asunto con Paul y ahora parecía preocupada.Le acaricié la cabeza, intentando transmitirle tranquilidad:

—No te preocupes, es culpa de mi hermano. Que venga de repente a casa por razones de la empresa de mi padre me pone nervioso.

'Y que te haya visto semidesnuda y que hayas visto que es guapo, también.', pensé.

Paré el coche lentamente cuando me avisó de que lo hiciera. No había entrado todavía en su casa, pero desde fuera se veía que no era tan grande como la mía. El trabajo de mi padre siempre le había dado mucho dinero que podíamos permitirnos gastar en lo que queríamos, cosa que no sé si es muy buena.

—No te agobies— Dijo y me dedicó una hermosa sonrisa.

Tras devolverle la sonrisa y notar que toda mi rabia se iba al mirarle sonreir, dije:

—¿Nos vemos mañana?

—Por supuesto.

Abrió la puerta del coche lentamente, no sabía si asustada de romperlo o si era porque no quería irse todavía.

—Tsss—Llamé su atención.

En cuanto se volvió hacia mí le besé en una de las manos y esperé verle aquel sonrojo que tanto me gustaba ver. Ella se marchó tras despedirse de mí y sonreírme alegre.

Al verla desaparecer tras la puerta, borré la sonrisa de la cara y me marché a toda velocidad a casa.

Me encontré con Paul en la cocina, preparándose cualquier cosa:

—¿Se puede saber qué se te ha pasado por la cabeza para venir aquí?

Él se giró indiferente a mirarme mientras giraba la sartén. Devolvió la vista a la comida y habló:

—Por mi cabeza no, por la de Jerry.

Jerry era mi padre, pero solo se refería a él de esa forma cuando estaba conmigo. Cuando estaba con él lo llamaba 'padre' o Jeremy.

—Al parecer alguno de los peces gordos organizó una fiesta invitando a Jerry y toda su familia. Es en unos meses y quiere que antes de ir aprenda cosas de la empresa para presentarme como el heredero.

'Ya me lo está restregando de nuevo', pensé.

—Bueno, pues que te lo pases bien.—Empecé a subir las escaleras dispuesto a ir a mi habitación.

—Tu también deberás ir, y estoy seguro que a Jerry le encantaría que llevaras a tu nueva amiga.

—Lo tendré en cuenta.—Me mordí la lengua por no contestarle lo de 'nueva amiga'.

—Qué cena más divertida será la de hoy...—Rió en un susurro.

Lo ignoré y me fui a mi habitación a cambiarme y a coger a Bob, dispuesto a pasearlo hasta casa de Ryan.

...

—¿Que ha vuelto Paul?—Preguntó mientras dejaba a Bob correr por su jardín.

—Y dice que es porque mi padre tiene una cena importante en la que quiere presentarle como el heredero de la empresa.

Mi no tan 'CRUSH'Donde viven las historias. Descúbrelo ahora