ROWBRINA VILLE

Saber Actuar

Sonrisa por acá, sonrisa por allá, abrazo va, abrazo viene, todo era felicidad durante las grabaciones. Antes de grabar no nos hablabamos y cuando se terminaba tampoco, lo que empezó como un rumor se volvió realidad, pero eso no dolía, era la indiferencia a la que podía llegar Rowan, la niña linda, tierna, amorosa que ama a todo el mundo, tiene su lado oscuro y es ese.

Durante las escenas intentaba hablar con ella, claro que hablabamos, pero solo cosas de la serie, cosas triviales, cosas que no tuvieran nada que ver con nosotras. Cualquier mención de la relación ella sonreía y me dejaba con la palabra en la boca, porque se iba para otra parte.

Si le escribía, me dejaba en visto, si le llamaba, me rechazaba la llamada. Llegue a un punto, donde simplemente acepte lo que pasaba y me concentre en los demás proyectos que tenía. Pronto se estrenaría la pelicula, la producción del disco ya estaba aprobada, tenía que seguir componiendo.

Por todo lo que estaba pasando, yo me refugiaba en Sofia y adivinen que, monte algunas fotografías con ella, agradeciendo que estuviera a mi lado, eso era echarle más leña al fuego y a este punto ya no importaba.

Fingir que todo estaba bien en mi vida, que haber terminado con Rowan no me afectaba, que todo seguía igual, que ella no me hacía falta, se volvió rutina. Todos los que sabían de la relación preguntaban, yo solo respondía que se terminó, teníamos muchas diferencias y era lo mejor. Pero al final del día siempre hacía lo mismo, escribirle, llamarla y quedar ignorada.

Bravo Sabrina te mereces un premio por la mejor actuación de tu vida.

Pero está noche fue diferente, estaba mal, no aguantaba nada, mi corazón latía a mil, era una opresión entre mis costillas y pecho, mis ojos se llenaban, pero no salía nada cuando quería llorar, simplemente no sucedía, caminaba en mi habitación, de un lado a otro, desesperada. Miraba el celular y hacía poco le había mandado un mensaje, no confirmaba su llegada, y una pregunta llego a mi, me bloqueo.

- Te encuentras bien hija - Me hablo mi madre desde la puerta, luego entro y se sentó en mi cama.

- Alguna vez haz querido llorar, pero no puedes -

- Si, ven acá - Me dijo mietras estiraba sus brazos, yo me acerque y la abrace sentandome subre sus piernas - Deja de fingir que estas bien, deja de fingir que no te afecta, deja de fingir que todo sigue igual, y cuando eso pase, tus lagrimas saldran, pero antes acepta que nada esta bien y que todo lo que está pasando te duele.

- La extraño tanto y no quiero perderla - Y con decir esto yo rompí en llanto.

Mi madre me consolo hasta quedarme dormía, después de tanto llanto no tuve energías para verificar si el mensaje había llegado.

El mensaje tenía una foto mía haciendo un puchero y abrazando un conejo, que ella me había regalado tiempo atrás con el siguinte texto. »Sabsabs: Hola pequeña, te extrañamos, que tengas una linda noche, besos«

Al día siguiente, me fije que le había llegado el mensaje, eso me tranquilizó, porque también lo había visto y en su foto de perfil del Wapp había puesto una foto del mismo peluche y su mensaje era un corazón del color que habíamos escogido, como nuestro. Una sonrisa adorno mi cara, estaba más tranquila, después de todo, había sacado todo lo que tenía reprimido y eso me hizo sentir más ligera. Y aunque no fue directamente, había contestado mi mensaje.