Ese ardor dentro de ti, esa pesadez, la tristeza que nunca sale de mi cuerpo, ese sentimiento de querer regresar a mi vida pasada, seguir viviendo lo mejor que me ha pasado. Eso ya acabo, lamentablemente es así, no puedo dar marcha atrás hacia algo imposible. Ya volví a la secundaria, mi último año al fin, el primer día, el peor de todos y más para mí.
Sobre todo cuando las personas te preguntan que sucedió con Niall o la razón por la que regrese, me da ese remordimiento dentro de todo mi ser, cuando me siento débil y no sé exactamente como responder. Es demasiado frustrante garabatear ideas en mi mente para dar una respuesta aceptable. En realidad no sé porque preguntan, desde que volví el rompimiento entre Niall y yo ha sido un caos, todos se dieron cuenta.
Existe algo peor que esto… la gran noticia de la relación de Niall con Demi, de esto no tengo palabras.
Ha sido un día regular, estuve con mis antiguos amigos, obvio las repuestas llegaron, las respondí, debido a que en todas las vacaciones pasé encerrada en mi cuarto, llorando, escuchando música e ignorando a todo aquel que quisiera ver mi estado.
El día pasó lento, pero el final del día llegó, no hable así como que mucho, en realidad casi con nadie, a algunos solo los saludé.
-Hey, espera –dijo una voz conocida tocando mi hombro.
-Hola-dije con una pequeña sonrisa.
-Tenemos que hablar- dijo con una hermosa sonrisa, como siempre.
-Drew me tengo que ir ahora –dije haciendo una mueca.
-Está bien, está bien, solo una pregunta- solo lo miré esperándola.- ¿Definitivamente sola?
Estaba sola en diferentes sentidos, pero hablando de Drew ya sé a qué tema se refería y si, si estaba sola.
-Completamente sola- dije yéndome de ahí.
Desde que llegué de nuevo a mi país natal, recibía todos los días una video llamada de alguno de los chicos. Amo tanto que no me hayan abandonado, aun que yo si los haya dejado. Sin falta todos los días a eso de la tarde uno de ellos hablaba conmigo, pero con el que más charlaba era con Harry.
La mayoría de las veces sea con quien sea de los chicos, siempre terminaba llorando, en estos meses he estado demasiado sentimental, al principio era exagerada mi depresión, gracias a ellos ha ido disminuyendo.
Niall volvió a la banda, gracias al cielo, me mataría si lo hacía. No es que el me lo haya dicho, desde la fiesta no le hable más, pero los chicos me tienen informada, él me interesa, definitivamente me importa y me gusta saber cómo está.
Lamentablemente dicen que no es el mismo, no sonríe, no hace malos chistes, come menos, no está muy aseado, no les habla mucho y lo que más me dolió saber es que llora todos los días.
Hoy venía otra llorada mas, en estos instantes, recibiendo una video llamada de Harry.
-Hola –dijo el ruloso.
-Hola-dije con una pequeña sonrisa.
-¿Confías en mi? –dijo y no entendí el porqué.
-Obvio, pero no entiendo nada-dije sin entender.
-¿Me quieres? –siguió preguntando.
-Claramente Harry, ¿Qué sucede? –dije impaciente.
-Si es así, prométeme que no cortaras esta llamada hasta que yo diga, debes ser fuerte, es hora, es tiempo, si no quieres hazlo por mí y por los chicos que queremos lo mejor para los dos-dijo resolviendo un poco el asunto.
-¿Quiénes dos?, ¿De qué hablas?, Harry explícate, no voy a cortar la llamada hasta que me digas-dije acelerada.
-Controlate-dijo moviendo la laptop, hacia el lado izquierdo de él, dejándola en los brazos de una persona, la cámara estaba tapada, creo que fue Harry con su mano, seguidamente la quitó. Mierda es Niall.
-Hola –dijo con su cara hermosa como siempre, estaba descuidado, con un poco de barba, cabello despeinado, ojos caído y con ojeras, labios resecos, algo malo le pasaba a mi Niall.