- ¿Qué es lo que le pasa? -Me preguntó por fin tras un tiempo en silencio.
-Tú sabrás, esto yo no lo he provocado- Me levanté del suelo para ir a mi cama y tirarme encima de esta.
Oí pasos en la habitación, sabiendo que eran suyos perfectamente.
-Gurin, ya lo sabes, nosotros no podemos... -Lo corté antes que volviese a contarme la misma parrafada.
- ¡¿Y qué si no soy tu prometida o sí lo soy?! ¡¿Qué importa esta sociedad que no permite libertad a todo aquel que la desea?! -Dejé de recriminarle para aguantar el nudo en mi garganta. -¿Es que eres tonto o qué? -Le pude preguntar sin romper en llanto como una tonta sensiblera.
-Yo....- No dijo más, se quedó callado. Mi cama se hundió mientras unos brazos me rodeaban por la cintura hasta apegarme al cuerpo de una persona.
- ¿Qué... qué haces? -Pregunté sorprendida. -N-no que éramos... no podíamos.
No dijo nada y me apretó más a él. Haciendo que mi corazón se vuelva loco y empiece a palpitar como si no hubiese un mañana.
- ... No sé lo que me pasa, me siento extraño contigo- Me sonrojé ante su declaración. -Es como si quisiera abrazarte y no soltarte, tenerte a mi lado, pero... ¿Es en serio? ¿Con una persona con la que no se me permite por no ser quien el mundo quería? Simplemente no puedo creerlo- Bajé la cabeza, tampoco es que supiese qué decirle exactamente.
-Tienes razón, pero... - No se me ocurría nada a pesar de aquel sentimientos que no quería dejarlo ir. -Pero, ¿y qué importa? No somos personas a las que se le permita enamorarse , sí, pero aquí nadie viene y nos dice que esto esté prohibido. Así que igual podemos... intentarlo- Lo miré de reojo y ahí supe que su sonrisa se me quedaría para siempre grabada en la cabeza.
-Si hacemos esto seguramente saldremos heridos. ¿Estás realmente segura de empezar algo que se puede romper en pedazos fácilmente?- Asentí aún de espaldas a él. -Oye... -Me giró y se puso encima mía, acorralándome. - ... Por lo menos mírame cuando lo dices, boba- No pude evitar sonrojarme, a lo que él volvió a sonreír.
- ¡Ca-cállate! ¡No es que este avergonzada por ti ni nada! -Grité apartando la mirada. Cogió mi mejilla y me hizo mirarle.
-Cierra los ojos... -Susurró cerca de mi cara. -Por favor- No sé muy bien el porqué pero le hice caso. Lo próximo que noté fue sus labios unirse con los míos en un beso. Un beso largo pero bonito, en el que exponíamos nuestros sentimientos.
-Mi lady, pronto estará la cena- Nos avisó Sebastian desde el otro lado de la puerta.
Me separé de Ciel e intenté controlarme para que no sospechase.
-Gracias- Cuando oí sus pasos indicándome que se había marchado suspiré aliviada.
- ¿Por qué haces eso? -Me preguntó un tanto enfadado Ciel, a lo que lo miré nerviosa. - ¿No que no importaba lo que pensasen los demás de lo nuestro y todo ese estilo de ñoñerías?
-Bueno... Todavía no he dicho que seamos algo o que no me importe exponerlo. -Reí hasta que me di cuenta de que no se encontraba con el modo de enfadarlo.
Salimos de una pelea para entrar en otra. Qué bonito es todo...
- ¡Ciel, espera! -Me levanté de la cama para correr hacia él y agarrarle, abrazándolo por la espalda, y cerrando los ojos. -Lo siento. Es que en realidad no sé el que hacer... Esta es mi primera... -Antes de seguir me callé, ya que casi me descubre. Me miró divertido, con una sonrisa y aura burlonas.
- ¿Tú primera... qué? -Bajé la cabeza avergonzada.
-Pues... Mi primera... Relación- Terminé de decir para jugar con la ropa de Ciel. Se giró por completo y me agarró de las mejillas con sus dos manos, para darme un corto beso. Se separó, no a mucha distancia, aún agarrándome de mi sonrojada cara. -Eres un bipolar...
-Sí, pero... -Se me acercó más, hasta juntar nuestras frentes. -... Solo me pasa eso contigo.
- ¡Ca-cállate idiota! -Le grité sonrojándome aún más. -Me alegra que hayamos conseguido pasar ya dos pruebas- No pude evitar sonreír. Sonreír por primera vez en mucho tiempo.
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Pasado muy presente (Ciel Phantomhive) [EDITADA]
FanfictionNo supuse que mi vida era todo una ilusión. No por el hecho de que la gente me mintiese por una razón sino por el hecho de que me encontraba viviendo... ¿En la época errónea?