The Hot Criminal® (+18)

》Trece《

Natacha jamás pensó lo importante que era ella para Justin,siempre pensó que el sólo la buscaba para la cama pero con la valentía que enfrentó a Marcel todo eso cambió,él la hizo sentir única,amada y apreciada,se dio cuenta de lo mucho que también ama a Justin.

—Ya esta.—terminó de curar la herida de el labio de Justin.

—Duele.

—Como no te va a doler si te dio una bofetada como para darte la muerte.

Hace 3 horas que llegaron a la casa de Natacha,salieron como rayo de la fábrica,ninguno de los dos quería volver a ver a Marcel.

—No seas tan exagerada.

—Déjame ver tu espalda.

—No es necesario,de seguro esta bien.

—Déjame ver.

Justin se recostó sobre su vientre y Natacha levantó su camiseta.Se puso la mano en la boca para no soltar un gritó, tenía la espalda con un gran moratón,cubría gran parte de esta, ella tocó sobre el hematoma y Justin gimió.

—¿Es muy grande?

—Demasiado.

—¿Esta muy feo?

—Asqueroso.

—Pero no duele tanto.—se dio vuelta y Natacha quedó sobre su vientre.

—Gracias por ayudarme.—ella paso su dedos por el rostro de Justin.

—Lo haría sin pensarlo.

—¿Por qué?

—Porque te quiero.

Ella cerró los ojos saboreando esas palabras.

—When you say you love me,oh no,I love you more, when you say you need me,oh no,I need you more.—ella cantó sobre los labios de Justin.

—No sabia que cantabas.

—Pues ahora lo sabes, ahora quiero que tu me cantes.—ella depósito un beso en su cuello.

—Yo no lo hago bien, créeme lo digo con sinceridad.

—Justin.—hablo con reproche.

—¿Qué?

—Anda canta una canción para mi.

—Ahora no, amor estoy un poquito cansado.

—¡Perdón!—ella se bajó con rapidez del vientre de Justin.

—Dije que estaba cansado pero no que te salieras de encima.—tomó la mano de Natacha para que ella quedará más cerca de su cuerpo.

—¿Tienes ánimos de salir?

—Realmente no, pero, ¿para qué?

—Nada, olvídalo, era sólo para que fuéramos a verificar la información de Sofia.

—¡Vamos!—Justin se levantó de la cama y tiró del brazo de Natacha.

La hizo volar por las escaleras, y de la misma manera la introdujo al auto. Condujo con prisa,no tenía ni un pepino de idea para donde se dirigía.

—¿Sabes donde es?

—No.

Ella soltó una sonora carcajada,Justin era tan alterado, manejaba él cuando la que sabía la dirección era ella e iba todo desarreglado, como si alguien lo hubiese ultrajado.

—¿De que te ríes?—preguntó él desviando la mirada un segundo de la carretera para verla.

—Tienes la camiseta toda desarreglada.