Fallen Angel. Z.M

-Juegos del Hambre.-

► Solía pensar que la peor cosa era terminar sólo en la vida. Pero, no lo es. Lo peor es terminar con alguien que te haga sentir sólo.

Robbie Williams. ◄

Anne.

Se me cae el alma a los pies, y al parecer a él también. No me sale ninguna palabra de mi cuerpo, sólo le miro sus ojos avellanados claros y obviamente frunzo el ceño, lo que le hace sonreír. Recuerdo el momento cuando Katniss encuentra a Peeta aliado con los profesionales, de alguna manera me siento igual al ver a Zayn entrando al auto en vez de mi padre. Con la mirada intento buscar a mi padre por lo que es el callejón, no encuentro nada.

Debo admitir que el ruido de la puerta abrirse me regresa a la realidad. Zayn entra con mucha rapidez, me mira un rato y después empieza a andar. A continuación intento abrir la puerta, pero es imposible, no puedo. Está con seguro. Por mi cabeza pasan locos pensamientos de plan de escape, pero no puedo ejecutar ninguno.

–Hola, Anne.– Murmura Zayn a un lado mío, no le puedo mirar la cara pero apuesto que está sonriendo.

–¿Do-donde está mi padre?.– Le pregunto, pero aún así no le miro el rostro. 

–Tuvo suerte hoy, está en el bar. Dijo que se iba divertir un poco.–

Sabía que no era del todo cierto. Tal vez, nada era cierto. ¿Y si quería secuestrarme? Decidí quitarme esos pensamientos de la cabeza, pero no pude. Sin darme cuenta le estaba viendo su rostro y yo tenía algunas lágrimas rodando por mis mejillas, me las limpié, no quería que él me viera así.

–Vamos, Anne. nos divertiremos un rato.–

¿A qué se refería con eso? Apretujé mi cuerpo contra el asiento de piel y dejé que las lágrimas mojaran mis mejillas, ya que Zayn no podía ver mi rostro porque me voltee para la ventana.

–¿Qué tienes?.– Me preguntó.

Creo que si hubiera un concurso de preguntas tontas y obvias, esta hubiera ganado sin lugar a dudas. Cerré los ojos y apoyé mi sien en la ventana empañada por la humedad, el contacto frío con mi piel me hizo morder el interior de mi mejilla.

–¿No me vas a contestar, Anne?.–

Me estaba cansando con sus preguntas, tenía que hacer algo. Metí mi mano en mi bolsillo derecho de mi pantalón y lentamente empecé a sacar mi celular.

–No creo que debas hacer eso.– Murmuró.

Me quede helada, sentí como la sangre se iba de mi rostro. ¿Cómo sabía?

–¿Porqué?.– Pregunté guardando el celular con mis sudorosas manos.

–No es cortés llamar a la policía cuando alguien te dice que se van a divertir. ¿O acaso llamas a la policía cuando tus amigos te dicen que se van a divertir?.–

–Pero tu no eres mi amigo.–

–Tienes razón, nena. Pero aún así nos divertiremos.–

Mi corazón empieza a latir como un caballo desbocado, y solamente cruzo los dedos para que no me de un ataque de ansiedad.

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Narrador.

El auto para enfrente de lo que parecía ser un bosque, el reflejo de la luz del carro mostraba la corteza de los arboles, algunos frondosos y otros secos. La luna se asoma por una de las montañas, saludando a los visitantes. Zayn es el primero en bajar el auto, ya que Anne se rehusa bajarse.