Fire + Yoonseok

Capítulo 1

—¡Hoseok! ¡Tráeme las partituras que dejé sobre la mesa de mi habitación! —grité desde la sala de ensayo, en donde me encontraba sentado tocando el piano, cuando se me ocurrió la manera perfecta de continuar una de mis últimas composiciones.

—Voy~ —canturreó mi amigo.

En menos de un minuto le observé entrando por la puerta con los papeles en la mano.

—Son estos, ¿verdad? —asentí en respuesta y este me los entregó—. Menos mal, tienes aquello hecho un lío.

Reí un poco, aquello era cierto.

—Voy a la sala de baile, si necesitas algo me avisas. El resto de los chicos creo que están comiendo algo o durmiendo.

Asentí sin mirarle mientras colocaba las partituras encima del piano.

Oí como la puerta hacía ruido al cerrarse, relajándome al estar de nuevo solo en la sala y poder concentrarme en mi trabajo.

~.~

Estuve componiendo hasta las cinco de la mañana, y como me dolía bastante la cabeza, decidí despejarme un poco y ver qué estaba haciendo el resto.

Salí de la habitación y me dirigí hasta la sala de baile. Allí, Jimin y Jungkook se estaban riéndo, mientras Hoseok continuaba bailando, pero seguía la conversación de los menores.

—¿Qué hacéis, chicos? —me acerqué a ellos, bostezando un poco por el cansancio.

—No mucho, Jungkook y yo acabamos de practicar un poco con nuestra voz, y ya nos ibamos a dormir. —asentí en respuesta—. ¿Estabas componiendo?

—Sí, acabo de terminar, ahora quería despejarme un rato. —aparté el pelo que me caía sobre la frente, y noté que estaba sudando un poco.

—Hmh... Deberías descansar un poco, hyung. Pareces cansado. —Jungkook hizo una mueca.

—Sí... Creo que me quedaré un poco con Hoseok y luego me iré a dormir, lo prometo.

—No aguantes mucho despierto. —Jimin sonrió y palmeó mi hombro, mientras salía de la sala con Jungkook.

—Qué, Hope, ¿cansado? —pregunté sentándome en el suelo, mientras este bebía un poco de agua.

—Un poco, sí. —sonrió mientras se secaba el sudor con una toalla—. Creo que por hoy no haré mucho más.

—Sí... Ambos necesitamos un descanso. —me dejé caer hacia atrás mientras cerraba mis ojos.

Sentí una presencia a mi lado, por lo que supuse que Hoseok se había tumbado cerca de mí, pero en ningún momento volví a abrir los ojos.

Prácticamente, estaba tan cansado que me parecía imposible volver a abrirlos.

Pero, cuando noté un contacto en mi mano, los abrí sorprendido. Giré mi cabeza hacia J-hope, el cual miraba al techo. Bajé la vista hasta nuestras manos, las cuales estaban entrelazadas.

Aquello me pareció un poco extraño, pero no era de más que J-hope se mostrase cariñoso con los miembros. Aún así, aquello me sorprendió bastante, dada la situación en la que nos encontrábamos.

Pero decidí no decir nada, y simplemente ponerme a pensar en mis cosas, hasta caer dormido.

(...)

—Yoongi... —un susurro se coló por mi oreja—. Yoongi...

Poco a poco comencé a abrir mis ojos, quejándome automáticamente de mi espalda. Había dormido en el duro suelo de la sala de baile, lo que me provocó un dolor instantáneo al querer incorporarme.

—Ahg... Ah... —me quejé llevándome la mano hacia atrás.

—Fufufu... Eso te pasa por dormir en el suelo.

Reconocería aquella voz en cualquier parte.

—Cállate, enano. No me dormí aquí por voluntad propia. —terminé de incorporarme, ignorando completamente la risa de Jimin.

—Fue tu querido Hoseok el que quiso tener una velada romántica, ¿o qué? No veo otra razón por la que dormirías en el suelo. —una sonrisa ladina apareció en su rostro.

—Preocúpate de tus propias relaciones amorosas antes de inventarte las de otros. ¿O acaso es que Jungkook ha vuelto a ignorarte?

Sabía que aquello había dado en el clavo, aunque al ver la expresión triste de Jimin, me empecé a sentir mal por haberlo mencionado.

Mi amigo había estado enamorado de nuestro maknae durante varios meses, pero este continuaba sin notarlo y creía que todo el cariño excesivo de Jimin era una simple forma de molestarlo y burlarse de él. Y aquello hería a Jimin, ya que cuando intentaba algo serio, Jungkook se ponía incómodo y la relación entre ambos se volvía más fría de lo normal.

Y por otra parte, Jimin estaba seguro de que Hoseok y yo manteníamos algo en secreto, lo cual es totalmente absurdo. Hoseok es como un hermano para mí, con el que puedo sacar mi lado más tonto y reírme sin parar. ¿Cómo puede pensar que puede haber algo entre nosotros? ¡Si además soy heterosexual!

—Jimin, tampoco quise decir... —intenté arreglar mi metedura de pata, pero este me cortó antes de que pudiera terminar la frase.

—No, no... La verdad es que tienes razón... —rió tristemente—. Ya no sé que más hacer, Yoongi... —su voz se quebró al final de la frase—. No puedo seguir intentándolo, y cuando la cosa se pone incómoda, fingir que todo era una simple broma entre amigos. No le estoy siendo fiel a mis sentimientos...

En aquel momento no sabía qué decir, pero podía sentir que mi amigo estaba destrozado. Para él no debía de ser fácil tener que aparentar algo que no es, más aún delante de la persona que ama. Por lo tanto, lo único que se me ocurrió fue reconfortarlo con un abrazo. Jimin aceptó mi acto, y me pareció que se fue calmando poco a poco.

—¡Oh! No sabía que interrumpía algo... —ambos desviamos nuestra mirada hacia la puerta, donde vimos a Hoseok sonriendo—. ¿Ocurre algo? —su expresión cambió al ver los ojos llorosos de Jimin.

—N-No, hyung... —Jimin se separó de mí y limpió los restos de sus lágrimas.

—Jimin, no puedes decirme eso mientras te veo así... —Hoseok parecía cada vez más preocupado.

Pero Jimin no le contaría su problema, era algo que llevaba muy escondido, y no me lo habría contado a mí si no lo hubiera descubierto en su día. Por lo tanto, yo era el único que sabía sobre sus verdaderos sentimientos hacia el maknae.

—De verdad, Hoseok, no es nada. Yoongi ya me ha dado algunos consejos, ahora solo necesito estar solo un rato... —pasó por el lado de J-hope y desapareció por la puerta.

Hoseok tenía una expresión triste en el rostro, creo que está decepcionado consigo mismo porque Jimin no confía en él para contárselo.

Pero Hoseok, créeme, no es algo fácil para el menor.

—No te desanimes, en verdad es algo difícil para él. Lo contará cuando tenga la fuerza y confianza suficiente para hacerlo. —sonreí, intentando reconfortar a Hoseok.

—Pero a ti sí que te lo ha contado... ¿Por qué a mi no?

—Yo no lo sabría si no lo hubiera descubierto en su tiempo por un accidente, así que no me lo ha contado porque quisiera.

No muy convencido, asintió sin querer darle más importancia al tema.

—¿Vienes a desayunar? —preguntó con una sonrisa, cambiando de tema.

—Ah... No, quizá más tarde. Voy a mi estudio.

—Está bien, nos vemos. —se despidió con la mano y salió por la puerta.

Suspiré, aquello había estado cerca. Esto me pasa por abrir la boca de más, pero que le voy a hacer...

Ahora solo me quedaba ir a buscar a Jimin.

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Primer capítulo <3