Fire + Yoonseok

Capítulo 2

Había decidido buscar a Jimin, ya que al abandonar la sala cuando Hoseok preguntó por su estado de ánimo, no tenía ni idea de dónde ni cómo se podía encontrar ahora mismo. Cada vez me seguía sintiendo más culpable de haber utilizado tan bruscas palabras como autodefensa, ya que encima sabía que no era algo fácil para él. Pero, qué le voy a hacer, ahora solo me quedaba asegurarme de que se encontraba bien.

No tenía ni idea de donde podía estar, aunque sabía muy bien en donde no buscar, ya que sería imposible que estuviera en la cocina desayunando con el resto de los chicos. Seguramente está en un lugar donde pueda estar solo sin que nadie lo moleste...

La sala de grabaciones.

Conozco tan bien a Jimin... Cuando se siente mal por algo que haya sucecido, busca la soledad en esa sala. Me confió que ahí puede pensar con claridad y relajarse, ya que está en su ambiente, un lugar que desprende ese aura mágica y donde casi puedes oír una voz entonando perfectamente de fondo. Claro, eso para alguien que viva la música como nosotros. Y el canto como Jimin.

Entre toda esta reflexión, ya me había situado frente la puerta. Toqué dos veces, por si había alguien. O en el caso de que estuviera Jimin, que este contestara.

Pero el silencio era abrumador.

No perdería más el tiempo, por lo que la abrí y me adentré en la habitación.

—Conque estabas aqu... —comencé a decir, pero quedé cortado de golpe al ver la escena que se estaba dando ante mis ojos.

Jimin. Jungkook. Besándose.

Abrí mis ojos de par en par, y estos se separaron a la velocidad de la luz cuando escucharon mi voz. Un notable sonrojo se apoderó de sus mejillas. Jungkook bajó la mirada, mientras Jimin estaba articulando sonidos extraños, intentando hablar.

—N-No es lo q-que parece, hyung... —consiguió pronunciar.

—Pues ya puedes ir explicándomelo. —me crucé de brazos—. Podéis. —rectifiqué mientras posaba mi mirada sobre Jungkook, el cual me la correspondió dando un saltito en el sitio.

No era mi intención asustarlo tanto, parecía muy arrepentido y avergonzado, pero no estaba de humor. Jimin había estado sufriendo mundos por el menor, y encontrármelos así después de haber llorado en mi hombro hace tan solo unos minutos atrás, no me hacía mucha gracia.

—Verás, hyung... —me sorprendió que Jungkook tomara la palabra, pero claro, mi sorpresa no la demostré en mi rostro. Seguía con el ceño fruncido—. Jimin, se me ha confesado.

Miré incrédulo a mi amigo, el cual tenía la mirada baja.

—¿Eso es cierto? —pregunté, haciendo que me mirara.

Asintió.

—Sí... Después de hablar contigo, y de que Hoseok casi me pillara, no quería seguir sufriendo más. Prefería arriesgarme y contarles mis sentimientos al resto de los miembros, pero no seguir guardándomelos y haciéndome daño. Encima, ya empezaba a herir a otros, como a Hoseok. No quiero que nadie llegue a pensar que no confío en él, cuando es todo lo contrario...

—Además —habló Jungkook—, por fin me dí cuenta, de una vez por todas, de lo que sentía por Jimin. Llevaba meses confuso en cuanto a sus actos y a mis reacciones, y cuando me confesó todo lo que sentía y llevaba sintiendo durante todo este tiempo, sentí un cosquilleo en el estómago y una gran alegría y alivio invadió mi cuerpo. Entonces, me dí cuenta de que le correspondía. —sonrió tímidamente, mientras ambos se cogían de la mano.

—Yoongi, te pido por favor que no les digas nada a los miembros, nosotros lo haremos esta noche. —pidió Jimin.

Era demasiada información la que estaba intentando asimilar. Así que... ¿Jimin y Jungkook están saliendo?