(Completa) University [verkwan]

07.

Después de aquello, Vernon se dedicó a molestar a SeungKwan allá por donde se toparan. Cada vez que iba por los pasillos y se encontraban -la mayor parte no eran casualidades- el americano soltaba comentarios por lo bajo para que solo el pelirrojo los oyera, comentarios que le hacían ponerse como un tomate nada más escucharlos. Luego cuando la gente le preguntaba si pasaba algo, los nervios acudían a él enseguida.

La situación lo estaba poniendo nervioso, se estaba cansando de que Vernon lo andase provocando por toda la universidad con sus palabras y sobretodo con sus acciones, ya que, para el americano, siempre era un buen momento para pellizcarle el trasero y soltar un "Quiero lo que es mio".  Por su cabeza pasaban muchas cosas, y una de ellas era ¿por qué no devolverle las provocaciones? Se estaba planteando seriamente en hacerlo, pero tenía miedo de las consecuencias que eso podía llevar, aún así estaba dispuesto a correr el riesgo.

Las clases de su universidad estaban a  unos días para finalizar, así que sería perfecto actuar contra él y después marcharse de vacaciones para visitar a sus padres por un tiempo, al igual que JiHoon iría con SeungCheol a alguna parte.

Al igual que los otros días, Vernon lo besó cuando menos se lo esperaba, o eso creía el americano, mas no fue así, SeungKwan continuó con aquel beso que poco a poco se fue convirtiendo en uno necesitado. Se separaron para coger algo de aire, y la sorpresa por parte de menor era bastante notoria en su rosto. El pelirrojo empezó a caminar hacia la cafetería, dejando completamente atónito al castaño, hasta que reaccionó y empezó a ir tras él.

- ¡SeungKwan, espera! - dijo cuando notó que el nombrado aceleró el paso. Hasta que lo perdió de vista cuando giró el pasillo, quedó confundido al no verlo a través de la cristalera que daba paso a las mesas con cuatro estudiantes en ellas -. ¿Has visto a SeungKwan? - preguntó a su amigo WonHo que estaba junto a Kelly, ambos negaron haciendo un gesto con la cabeza -. Bueno...vale, gracias. -la pareja se miraron quedando confundidos, no pudieron evitar reír por lo bajo.

Bajó por las escaleras y caminó por el pasillo, hasta que alguien tiró de su brazo para meterlo en una clase, que poco después fue cerrada con el pestillo para que nadie los molestara.

- Menudo susto, joder. - dijo llevándose una mano al pecho, el cual se veía algo agitado.

Y sin más, el pelirrojo lo acorraló en la pared y lo empezó a besar. Primero fue un simple y corto beso, como el primero en aquella fiesta. A medida que avanzaba se iban alargando e intensificando.

- S-SeungKwan, ¿e-eres tú?

- Sí, imbécil. Ahora si me disculpas, tengo cosas que hacer y clases a las cuales asistir. - se dirigió a la puerta para quitar el seguro, pero Vernon se lo impidió.

- E-espera... no pensarás dejarme así, ¿verdad? - dijo señalando su parte baja, en la cual parecía haber un ligero bulto que estaba creciendo.

- Ese no es mi problema. - dijo encogiéndose de hombros.

- Sí, lo es. Y no saldremos de aquí a menos que lo solucionemos.

- ¿Te has vuelto loco? Ve a darte una ducha bien fría en el gimnasio.

- ¡Yaaaa! Yo no soy el que ha causado todo esto.

- Vaya, que pena. - "donde las dan las toman" pensó el cachetón.

- Para de burlarte de mi. - el pelirrojo volvió a acercarse al menor, volvió a plantar un beso húmedo.

- Nos vemos luego, Honey. - dijo ésto último susurrando en su oído, para luego soltar un leve soplido -cosa que hizo que la piel del americano se erizara- y salir de ahí.

Una vez dejó atrás al americano, salió corriendo totalmente alterado. Su corazón latía a mil por hora. No se creía lo que acababa de hacer, lo que acababa de decir. Nunca pensó que fuera capaz de llegar hasta tal límite, y sobretodo poder llevar el control de la situación. Obviamente esa persona no era él, estaba seguro de ello. Quizá acababa de descubrir una nueva faceta suya que solo el americano podía provocar.

[...]

Después de aquello consultó a su amiga si estaba bien lo que estaba haciendo o no, mas ella no hizo más que echárse a reír de la situación. ¿Y quién no lo haría? A cada palabra que decía el sus mejillas se ponían igual de rojas que su pelo, sin duda para reírse.
Finalmente tuvo que aceptar que aquello mercía aquellas risas, pero aún así no le sirvió de nada hablar con ella, así que nada más llegar a casa lo consultaria con su compañero de piso y sobretodo con la almohada.

Sabía que el pequeño pelirrosa no se lo pondría fácil, pero jamás le fallaría.

~

<Hello! :3

Bueno, aquí os dejo un capítulo más para que lo disfruteis! :3

Aviso que el SIGUIENTE CAP SERÁ EL ÚLTIMO, ya que, como sabéis, mi idea principal era un one-shot y bla, bla, bla.

Espero que os haya gustado. Votad, comentad y nos vemos en el final. :3

Att: Nyu Boo💕>