26.

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Mi corazón latió a mil, eso sería peor, preferiría que me matara aquí mismo.

Sólo deseo que alguien llegue y me saque de aquí, sólo eso.

Grité fuertemente sólo por si alguien me escuchaba y así me rescataran pero fue en vano, nadie ha venido por mi.

Escuché voces de mujeres, conocidas y sólo juraba para que no fueran ellas.

Pero todo se fue a la mierda cuando vi a Hiedra venenosa y a gatubela entrar por allí.

La pelirroja vestida de verde me miraba riéndose mientras que la otra sólo mantenía su gesto serio.

Hiedra se acercó a mi, caminando con sus altos tacones y colocó su mano por mi cara acariciando mi piel. Pude percibir un olor que me hizo toser al instante.

-Así te quería ver, maldita estúpida. -Espeto. Mi gargante arde.

Lo que aún no puedo entender es por qué tanto odio hacia mi. Yo jamás les hice nada a ellas.

-Ivy...

-Calla Selina.-Gritó a la chica de negro. Ella salió de la habitación. Al parecer no está de acuerdo con esto. Ojalá haga algo por ayudarme.

-Acabas de inhalar toxinas, no son venenosas pero si dañinas, tienen efectos retardados, pero cuando sientas malestares, sabrás que han empezado a hacer efecto, Disfrútalo.-Dijo riendo. Dios Dios. Necesito a Jack. Alguien dígale que me rescate por favor.

-Ivy, al fin viniste-Dijo Harley entrando por la puerta, con un bat de baseball en la mano derecha, y una navaja en la izquierda.

-No podía perderme esto.

-Doctora creo que ya conoce a Hiedra venenosa. Por cierto, vi a la gata salir molesta. ¿Que pasó?

-Ella no está de acuerdo con esto, esa estúpida.

Un celular sono en toda la habitación y supe al instante que era el mío cuando una canción de rock sono.

Harley lo tomó de mi bolsa y miro la pantalla.

-Es un número desconocido, veamos. -Pensé en gritar en cuanto ella contestaba.

-¿Hola? _____ no está haha -Dijo riendo. 1,2,3.

-¡Ayuda! Estoy secuestrada, ayudenme!!-Grité fuertemente.  Mi garganta empezó a arder nuevamente. Harley destrozó el celular con su Bat y luego se acercó a mi. Hiedra salió de la habitación.

-Estas acelerando tu muerte.

-Déjame en paz maldita loca-Forceje en la silla intentando desatar las cuerdas.

Sentí un golpe fuerte y luego todo se vio negro.

(...)

Mi cabeza daba vueltas. Intente abrir los ojos pero me fue imposible, duele como el infierno. Sentí mi cabeza apoyada en una superficie dura.

Vamos _____ abre los ojos, 1,2,3.

Abrí los ojos de golpe y me arrepentí al instante. Un inmenso dolor recorrió toda mi cara, la superficie de la que hablaba era el suelo.

Sentía un leve olor a sangre, no fue difícil adivinar que era la mía.

-¡Ayuda!-Grité sin importar el palpitante dolor en mi cabeza. De repente la puerta se abrió, a pesar de que mi vista estaba nublada, no fue difícil adivinar de que quien estaba allí es Jack.

Joder sí, es él.

-¡_____!-Exclamó asustado. Cerré mis ojos, dolía demasiado. Me sentí segura con él.

-Ayúdame -Susurre levemente mientras sentía mi respiración pesada. ¿Toxinas?

-¡Puddin!¿Que haces aquí?

Escuché su irritante voz. Maldita.

-Tú eres la responsable de esto...

-J..no...entiendeme.

Abrí mis ojos nuevamente. Es él, y ha venido por mi.

-Estúpida -Dijo Jack y le dio una bofetada. Muy fuerte, que la dejó en el suelo sangrando en su cara.-Vas a arrepentirte Harley.

Quise levantarme y saltar de alegría, él me quiere a mi, o..eso parece.

-A ver ____, voy a ayudarte...resiste...por favor. -Murmuró suavemente. Asenti, sintiéndome incapaz de pronunciar una palabra.

De un momento a otro el fuerte apretón en mis muñecas y pies ya no estaba, ahora yo estaba en los brazos de J, él está rescatandome.

Me guste o no, le debo la vida a Jack.

Vuelve a mi《Joker y Tú 》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora