Begin Again *PAUSADA*

Ojalá solo fueras eso

Capítulo 19

-Parece que ya se ha calmado un poco- suspira Luke- Odette, vamos a ir a casa de Stephen un momento para... Hacer unas cosas-

-Claro, yo me quedo aquí con Heather- coloco las manos en los bolsillos traseros del pantalón y balanceo inquieta.

-Te quiero- Luke deja un beso en mi frente y se va con sus amigos.

Cuando cierran la puerta el ruido de un teléfono me saca de mi nube y el miedo me inunda.

-Es el mio- dice Heather.

Me acerco un poco y veo que es un mensaje de Damon. Lo se, un acto un poco cotilla de mi parte, pero algo me decía que iba a ser el.

-Me tengo que ir, pero tranquila- me da un abrazo y yo me quedo estática- te llamo por la noche. Ah y- abre la puerta- no despiertes a Stephen, se despierta siempre de mal humor- y se va.

Después de eso tengo dos opciones:

1-Quedarme en el salón viendo una película.

2-Ir a mi habitación.

Escojo la segunda ya que en mi habitación estaré más cómoda.

Subo las largas escaleras hasta llegar a mi habitación y en ella encuentro a una persona dormida en mi cama.

No recordaba que la pelea había ocurrido en mi habitación.

Me acerco de puntillas hacia mi cama y me asomo para ver si está de verdad dormido.

Al comprobar que verdaderamente está descansando entro en el baño para ponerme algo más cómodo.

La cama ha sido invadida por Stephen. Esa es la verdad y a eso le sumo que en estos momentos me odio a mi misma y más como soy.

Tengo miedo de acercarme a él, porque él no me quiere.

Entró en el lado vacío de mi cama, con dificultad, y me tapo con la manta.

Mis ojos se cierran poco a poco hasta que un brazo me cubre por completo.

-¿Que haces?- susurro

-Shhhh-

Me giro aún difícilmente a causa de la gran fuerza del tatuado.

Me quedo mirando su rostro.  Es verdaderamente atractivo y no me canso de decirlo pero, hay algo en el que no encaja.

Contra mi fuerza de voluntad me levanto y me dirijo a la habitación de mi hermano.

Su habitación tiene un cierto parecido a la mía. Las dos están cubiertas por madera vieja que le da un toque hogareño y acogedor.

Lo bonito de esta es que su cama es mas grande que la mía y esta en medio de un circulo, que da más intimidad.

Me meto en su cómoda cama y me tapó por completo, como de costumbre.

Me duermo al minuto en esa cama con olor a mi hermano. 

Cuando abro los ojos mi hermano está a mi lado mirándome.

La luz entra por las ventanas que están encima de la cama. 

-¿Que haces en mi cama?- sonríe pícaramente

-No podía dormir y mi habitación estaba ocupada-

-Lo siento por lo ultimo- me abraza y me da un beso en la frente- puedes venir cuando quieras y lo sabes. Pero fue un poco raro encontrarte aquí-

-¿Que pensabas? ¿Que iba a dormir con Stephen?- me río

-Como haces desde que viniste a casa- mis ojos se abren de golpe sorprendidos- Si, lo se. Me haré el tonto pero no lo soy-

-Lo siento-

-No tienes por qué disculpar te, pero, ten cuidado-

-¿Por que?-

-Stephen no es como te imaginas y no quiero que te haga daño- me quita el pelo de la cara- no quiero que te deje más dañada de lo que estas-

Me da un beso en la frente y se levanta para meterse en el baño.

Yo hago lo mismo pero me dirijo corriendo a mi habitación, pero cuando entro, ya no hay nadie.

En la cama se encuentra una nota, la cojo y al abrirla leo lo que menos quería escuchar ahora mismo.

Sera mejor no vernos más. Tu eres tóxica para mi y yo soy un estorbo para ti.

Ojalá algún día me recuerdes, Stephen.

Ojala sólo fueras un estorbo para mi Stephen.