Castigados con los Merodeadores

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Narrador

-¿Que rayos esta pasando aquí?- dijo la Sra. Weasley.

Albus, Rose y Scorpius contuvieron la risa, y en su lugar colocaron caras de preocupación al ver a Molly Weasley.

- Contesten ¿Que esta sucediendo?- repitió Molly. - ¿Ustedes que hacen acá? ¡Vamos al patio, a abrir los regalos!
-Bueeenooo - dijo Rose. - Es... que... ¡Teníamos sed! Si, eso, teníamos sed, y por eso entramos a la cocina a buscar algo de tomar, pero Scor se resbalo, y cayo de trasero, y por eso nos reíamos - dijo Rose, rápidamente y luego sonrió.
- Si, eso es exactamente lo que sucedió - dijo Scorpius, sonriendo también.
- Oh, Scorpius, trata de tener cuidado, cariño ¿Estas bien?- dijo la Sra Weasley
-Si, me encuentro perfecto
-Fantástico, pero creo que todos ustedes tienen algo que decirme- dijo la Sra. Weasley
- ¿De que hablas? - dijo Albus.
- Ya se que ustedes le pusieron picante a la comida. Y los castigare, junto a los chicos - Dijo la Sra. Weasley, y los niños pusieron los ojos como platos.
- ¿Que? - exclamó Rose.
- Lo siento, pero sus padres se dieron cuenta y me dijeron que los castigará.
- Abueeeeeeeliiiiitaaaaaaaa- dijo Albus.
- Seeeeeñora Weaaaaasleeeeey - dijo Scorpius.
- Nada de eso, tendrán que limpiar el desván junto con los demás
-Pero ellos empezaron la guerra de bromas - replicó Rose.
- Lo siento, pero a las 3:00 de la tarde los quiero en el desván limpiando.

...

- ¡Gracias, Tío Percy! - dijo Rose, al ver el regalo que le había dado su tío.
- No hay de qué, Rose

Todos se encontraban en el patio, abriendo los regalos de Navidad.
Scorpius había subido a la habitación para buscar los regalos que le había comprado a Albus, Rose y Cassie. Cuando bajó Rose estaba sentada en el césped, abriendo una pequeña cajita que le estaba dando Albus. El chico se acercó a ellos.

- ¡Oh, Albus! - exclamó la pelirroja, viendo el collar con un dije en forma de cámara que le había dado su primo- ¡Gracias! - dijo y lo abrazo.
- De nada
- Ten, ahora abre el mío, Rosie - dijo Scorpius y le sonrió. Le entregó una caja rectangular.

P.O.V. Rose

Scorpius me entregó una caja rectangular, que pesaba como libro, era del tamaño de un libro, y, en efecto, era un libro.
Pero me sorprendí muchísimo al ver cuál era...

-¡Romeo y Julieta! - exclamé feliz y lo abracé. Ese era uno de los libros que siempre había querido leer, y nunca había podido.
- ¿Te gusta? - dijo Scor.
- ¡Me encanto! - dije - Siempre había querido leer ese libro. - lo solté.
- Me alegra que te haya gustado.
- Ahora abran los míos- dije y les entregue los dos paquetes a los chicos.

Narrador

Los chicos abrieron los regalos que les dio Rose, y ambos quedaron impactado.
Rose les había regalado una foto enmarcada de los tres en el patio de Hogwarts a cada uno.
-Vaya... -dijo Scorpius.
- Si...- dijo Albus.
-¿Y bien? ¿les gustó? - preguntó Rose.
- Rosie, es hermoso - dijo Scorpius.
- Te luciste - dijo Albus.
- Lo se, lo sé - dijo Rose - Vengan a mi, mis pequeños niños - dijo y los abrazo a ambos.
- Oh, toma Albus - dijo Scorpius dando al pelinegro un paquete grande y pesado. Albus lo abrió y adentro había una caja que decía en letras doradas "Quidditch: vivirlo y amarlo".
- Scorpius, no jodas - dijo Albus sorprendido - Yo... Escoba... Quidditch... ¡Gracias, teñido! - dijo Albus a Scorpius.
- Fabuloso ¿Verdad? - dijo Scorpius - Todo los qué hay que saber sobre el Quidditch está ahí, junto con unos cuantos objetos de colección.
- Es fantástico, Scor, pero ahora me toca deslumbrarte con el regalo más genialoso que pueda existir en esta vida- dijo Albus.
- Genialoso no es una palabra real, Alb
- Cállate, Rose - Dijo Albus- Ten. Le regaló una camisa que decía " No soy un rubio teñido".
- Ja.Ja muy gracioso, Albus.

El problema de la familia Weasley ... Bueno de RonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora