El ultimo hyuga (yaoi)[editando]

¿Feliz cumpleaños?

POV ELIOTT

Ya había pasado una semana desde el ultimo incidente, yo seguía yendo al instituto y después me pasaba por su casa. Hoy por fin vendría, me dijo que me adelantara ya que había olvidado su libro. Yo no sabía lo que me esperaba cuando llegara al instituto.

- Hola Eliott.- dijo una rubia con un gran escote, había otra dos detrás de ellas. Genial las reinas del drama venían otra vez. Si, otra vez, el primer día que entré no pararon de acosarme y como las rechacé se fueron enfadadas.

-¿Qué quieres?- dije lo más frío posible mientras rebuscaba en mi taquilla mi libro de lengua.

-¿Tu novia sigue chocha, digo pocha?- dijo con una risita, me giré bastante enfadado.

-¿Que has...?- no me dio tiempo de acabar ya que una de las prostitu... quiero decir amiga suya no me dejó.

-Celia te equivocas, no es una chica...- dijo mientras intentaba ocultar la burla en su voz.

- ¿Con que eres maricón? Te gusta que te den por culo, ya decía yo...- dijo mientras me insultaba, las lágrimas.¿ Porque todos se metían conmigo? ¿tan malo es ser diferente?

-Me das asco.- dijo mientras escupía sus palabras.

-¿ sabes que da más asco que un gay una puta?- Dijo alguien mientras se colocaba delante  mía con los brazos abiertos, como si fuera a protegerme de un disparo y usara su cuerpo como escudo. Era Eric, el cuál solía ser tímido ahora estaba mostrando fiereza para protegerme.

POV ERIC

-¿Qué has dicho? ¿Con que tu eres el otro mari...?- no la dejé acabar, ella se las va a ver conmigo.

-Basta ya, ¿Qué problema tienes? ¿Quieres que te golpeé? porque si es asi no me va a importar que seas una mujer, aunque dudo que llegues a ello.- dije con odio, si ahora mismo fuera un depredador ya le habría arrancado esa cabeza oxigenada que tiene.

-¿Como te atreves?- dijo mientras levantaba su mano, cerré los ojos esperando el impacto pero este nunca llegó. Cuando abrí los ojos seguro de que no me iba a golpear mi boca no pudo abrirse más. Rose estaba sujetando firmemente el brazo de la chica y su cara mostraba ¿odio? ¿furia? ¿ rencor? no sabría como describir como tantas emociones se reflejaban en la cara de alguien.

-Mira bonita, como no dejes a mis amigos en paz, te partiré el brazo ¿entiendes?- dijo mientras apretaba su agarre, la chica chilló a causa del dolor, no me extraña, Rose es capaz de partir paredes con un puñetazo así que partirle un brazo con una sola mano no le costaría tanto.

-Rose, déjala no merece la pena.- dije mientras intentaba que entrara en razón, aunque no podía contener la sonrisa, la cara de pánico de la chica me hacia bastante gracia. Al final Rose le soltó el brazo pero la empujo tirándola al suelo y acercándose a nosotros.

-¿Nos vamos? porque me estoy conteniendo las ganas de soltarle un puñetazo y hundir su cráneo en el suelo. Por cierto Feliz cumpleaños peque mío - dijo con una sonrisa macabra, para después cambiarla a una de felicidad y abrazarme. Si, hoy era mi cumpleaños, 19 de diciembre, una jodida será tan pequeño.

- Quiero hablar un momento con Eliott, adelántate tu.- dije con una mirada cómplice. UNa vez me aseguré de que Rose se había alejado mira a Eliott.

-¿Por qué les dejas que te traten así? ¿ Donde está ese carácter fuerte que tu tienes?- dije regañándole, no pudo contener las lágrimas y estas comenzaron a descender por sus mejillas.

-Yo...- pudo articular, lo abracé mientras acariciaba su pelo intentando tranquilizarlo.

-Feliz cumple, te quiero.- dijo mientras se escondía en mi pecho. A veces dudaba de quien era el pasivo en esta situación.

-yo también te quiero.- dije mientras lo estrechaba más fuerte entre mis brazos.

-y ahora si no quieres llegar tarde debemos irnos.- dije mientras me reía.

Las clases pasaron volando y extrañamente hoy no había entrenamiento. Eliott cuando volvió en si me pidió una cita a la que yo acepté con mucho gusto.

Pasamos parte de la tarde en una heladería y de compras. Insistía en regalarme algo a pesar de que yo me negué, al final me compró el último CD de Sia, le costó bastante y yo me negué varias veces pero el insistió diciendo que el dinero no era problema. Ahora nos encontrábamos en su coche camino a mi casa.

- Muchas gracias por todo Eliott, te amo.- dije mientras agarraba una de sus manos, me miró y sonrió apretando mi mano. Cuando llegamos a mi casa bajé del coche no sin antes darle un corto besos en los labios.

-¿Qué haces?- dije al ver que había aparcado su coche y venía detrás mía.

-¿Acaso no es obvio? quiero darte tu otro regalo esta noche.- dijo mirándome con una sonrisa pervertida, suspiré y le agarré de la camiseta atrayéndolo hacia mi y dándole un cálido besos en los labios.

-Lo esperare ansioso tigre.- dije mientras reía haciendo que el se sonrojara. Introduje la llave en la puerta y abriéndola. Dejé mi abrigo en el perchero y pasé al salón encendiendo la luz.

-SORPRESA- dijeron todos al unísono provocándome un susto. Comencé a llorar, estaba muy feliz. Todos estaban allí, todos mis amigos ya fueran aprendices o maestros.

-¿Papa, mamá?- dije sorprendido mientras corría hacia ellos y los abrazaba.

-¿No estaban de viaje?- dije mientras seguía llorando, ellos me abrazaron más fuerte.

-No íbamos a perdernos tu cumpleaños.-dijeron sonrientes una vez dejamos de abrazarnos, solo pude sonreir. Estaba demasiado feliz de que todos se hayan esforzado para poder hacerme la fiesta.

-No es justo yo también quería decirlo ¿De que vais?- dije Eliott fingiendo enojo, pero no pudo contener la sonrisa al ver mi rostro.

-¿Tu lo sabías?- dije abalanzándome sobre sus brazos para juntar sus labios con los míos en un cálido beso.

- Ejem...- carraspearon todos y tuvimos que separarnos algo sonrojados.

-Traje tapones, al parecer esta noche van a celebrarlo- dijo mientras reía maliciosamente, mis padres me miraron sorprendidos.

-Jovencito...- dijo mi padre algo sonrojado. Yo me sonrojé más todavía.

-Tengo 17 años, es algo normal.- dije mientras me excusaba y todos comenzaron a reir incluso mis padres. La fiesta estuvo genial todos comimos y bebimos mientras bailábamos y nos gastábamos bromas. Al parecer todos se iban a quedar en mi casa a dormir *que novedad* trajeron sus sacos de dormir ya que creo que no hay habitaciones para todos.

Eliott y yo nos fuimos a mi habitación y nos acostamos juntos.

-Muchas gracias por hoy.- dije mientras comenzaba a besar su cuello, el se sorprendió pero no se detuvo, gimiendo con cada caricia. Cuando lo miré a los ojos el me miraba serio.

- ¿Qué? es mi cumple, déjame ser el activo.- dije mientras le suplicaba, soltó una risa y me atrajo hacia su cuello para que siguiera con lo que había empezado. Esa noche volvimos a hacer el amor, tener sexo no suena nada romántico. Posiblemente mañana vea las caras sonrojadas de todos, maldito ELiott ¿Por qué tienes que gemir tan fuerte.