My Butterfly ~Kyuhyun~

Capítulo 37

-y me iré...

-bueno, hablemos a solas-le dije, puse mis manos sobre las de él y las quité del cuello de la camisa de Ryeowook.

-¿estás segura?-me dijo Ryeowook mirándome.

-vete-le dijo Kyunnie.

-sí, aún no te acomodas en tu nueva recamara ¿no es así?-él asintió-entonces ve, Kyunni... Cho Kyuhyun no me hará nada-él miró a Kyu, se arregló la camisa, le dio un desprecio y fue hacia las escaleras, cuando escuchamos el golpe sordo de la puerta al cerrarse, Kyunnie fue hacia el sillón y tomó siento.

-¿no te pondrás cómoda?-dijo sonriéndome de lado y acariciando el lado donde siempre me senté.

-aquí estoy bien.

-no te creo-elevé mi ceja derecha.

-habla rápido, no te quiero en esta casa.

-tú me amas.

El nerviosismo se apoderó de mi cuerpo al instante.

Ok, relájate Eunji, aún puedes salvar la situación, después de todo estaba claro que no sería fácil que Kyunnie te dejara ir.

Solté una sonrisa burlesca y me crucé de brazos.

-¿hasta qué punto puede llegar tu arrogancia? ya asúmelo, no te quiero, eres un ser insignificante para mí.

- ninguna de tus palabras o acciones se van al vacio polilla, me has demostrado lo que sientes por mi-me dijo citando mis palabras que le dije cuando me enteré sobre lo de su madre y mi padre-si no sintieras algo por mí, ¿Por qué me trajiste de vuelta a casa?

-ya te lo dije, pensé que podrías ser el remplazo de Lucas-él sonrió.

-realmente no sé por qué haces esto.

-quise ser sincera contigo.

-ayer pude ver que te lastimaban las palabras que salían de tu propia boca, el dolor era tan insoportable que ni siquiera pudiste aguantar hasta tu recamara y comenzaste a llorar enfrente de mí.

-fue por el recuerdo de Lucas.

-cariño... te mueres de hambre como actriz-resoplé y miré hacia un lado-es muy evidente que buscabas lastimarme, no era sólo "sinceridad" si no empeño, es como si hubieras buscado todos mis puntos débiles, lo que no descubriste es que mi gran punto débil eres tú-lo miré.

-¿entonces tengo que lastimarme a mi misma para que desaparezcas de mi vida? ¿Eso es lo que quiere Sr Cho? Si es eso, usted mismo entrégueme con lo que quiere que me lastime y lo hago-él se levantó, caminó hasta mí y se me ganó enfrente.

-pero si la que quiere lastimar aquí eres tú, ¿Por qué no me lastimas con tu pistola?-él se acercó más y posó su mano sobre la pistola que está en mi pierna-vamos srta Jung, ocúpela-tomé su muñeca para que me soltará, pero no movió su mano ni un centímetro, pasó su otra mano por mi espalda y me apegó a su cuerpo, bajó hasta mis labios, pero corrí mi rostro, posó el beso en mi mejilla y luego ganó sus labios junto a mi oído-¿quieres que te la pase?-sacó su mano, subió el vestido y tomó la pistola, respiré entrecortadamente.

-suéltame-le dije, sentí sus cálidos y suaves dedos sobre mi piel, lo miré y me encontré con sus intensos ojos marrones.

-sólo dame una razón lo bastante buena como para irme de esta casa-me susurró.

-ya no eres necesario aquí.

-te equivocas, aún no encontramos a tu asesino-comenzó a hacer círculos con su dedo pulgar en mi muslo-te doy otra oportunidad-su mano en mi espalda hizo que mi cuerpo se apegara más al de él.