Capitulo treinta y cuatro

3K 121 2
                                    

Pasaron días después de mi cita con Chaz. Desde ese día, no hablé más con Justin y él tampoco se me ha acercado. No se sienta en nuestra mesa en la cafetería, raro es la vez que se lo ve pasar por allí, tampoco me siento más con él en Biología, y no se habla con ninguno de nosotros.  Chaz había discutido con él sobre mí, así que tampoco se hablaban. Cuando llegaba la noche, cada uno se encerraba en su cuarto y no se dirigían la palabra, a menos que Justin no durmiera allí. También me había preguntado si me gustaba Justin, y que si era así, él aceptaría eso y no intentaría nada más conmigo. Yo le respondí obviamente que no me gustaba.

Qué triste me pone pensar en cómo nos separamos todos, y por mi culpa. Por pensar en que podía tener algo con Justin, pero por más que me gustaba, había decidido concentrarme en Chaz. Le había dado otra oportunidad a lo nuestro, y aunque todavía no éramos novios devuelta, salíamos juntos y trataba de enamorarme. Él dijo que no se daría por vencido, siempre me trataba de una manera especial. Este era el tipo de hombre que quise tener como novio siempre ¿Por que estuve perdiendo el tiempo con Justin? 

De todos modos, lo extraño. Extraño esos tiempos que pasábamos juntos, esos días en los que nos divertíamos, reíamos, hablábamos y bromeábamos, o los que sólo nos quedábamos juntos en silencio, sin nada que nos moleste. O cuando mirábamos películas, o me enseñaba Biología, la única materia que me costaba. Extrañaba a ese chico molesto que se había convertido en mi mejor amigo. Echaba de menos a Justin. 

Toda nuestra amistad se había arruinado, y ahora quería que volviera a ser como antes.  Si fuera tan fácil…

Con mis manos entrelazadas con las de Chaz, caminamos por los pasillos de la Universidad para llegar a mi casillero, atravesando las personas que iban pasando.  Cuando llegamos, solté su mano y abrí la taquilla. Saqué los libros que iba a utilizar y la cerré. Di media vuelta y uní mis manos con las de Chaz otra vez. Nos dirigimos hacia el salón de clases, yo tenía Biología, así que Chaz solamente me acompañaba.  A pocos metros, veo en la puerta una cabellera dorada. Veo a Justin…

Cuando llegamos a la puerta, nos quedamos frente a él. Estaba sólo estorbando el paso, impidiendo que alguien pudiese entrar.  Apoyado contra la puerta, tenía los brazos cruzados y la mirada perdida.

—Nos vemos más tarde, cariño —me dijo Chaz, y antes de irse estampó por unos segundos sus labios en los míos.  Me quedé algo confundida, todavía no nos besábamos en público ni éramos novios. Sólo nos habíamos besado un par de veces en unas de nuestras citas. Me volteé, encontrándome con la mirada de Justin en mí. Tenía el ceño fruncido.

—¿Puedes moverte? Quiero entrar —le hablé por primera vez en días. No movió ni un músculo.

—¿Son novios? —me preguntó. Ahora fue mi turno de fruncir el ceño .

—Eso no te importa

—Si me importa, soy tu mejor amigo

Me crucé de brazos.

— ¿Lo somos, Justin? —lamí mis labios—dime, porque la verdad no sé. 

—_______...—murmuró— te quiero ¿sabes eso?  Y no quiero que te alejes de mí

—Yo tampoco quiero eso

— ¿Por qué sales con Chaz? —me preguntó, gruñendo al decir su nombre. 

—Porque si, Justin

— ¿Por qué si? —frunció el ceño—No salgas con él

— ¿Por qué? —pregunté molesta.

Estúpida Obsesión {Justin Bieber & tú}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora