07

298 34 7
                                    

Anne.

Por fin apareció, su presencia se vuelve a notar en el pequeño pero acogedor local. No ha venido sólo, si no acompañado de una niña pequeña. Bastante mona la verdad. Ha pedido un chocolate caliente para ella, él se ha puesto detrás de la barra y a comenzado a atender a la gente. La pequeña se ha sentado en la primera mesa que ha encontrado libre cerca de la entrada, la cual está justo enfrente de la barra. A ambos se les notaba nerviosos, preocupados y él a pesar de estar en horas de servicio no paraba de ver su móvil impaciente.

    - Anne, ¿me podrías decir que hora es?- Preguntó de súpeto.

    - Oh claro, son las tres menos cuarto.- Intento decir lo más tranquila posible. No entiendo porque estoy tan nerviosa, cosa que creo que ha llegado a notar. Hizo una mueca y frunció el ceño mientras fijaba su mirada en la niña. Se puede decir con seguridad que algo pasaba, llevaba tiempo sin verlo así, estaba demasiado despistado, mucho más de lo habitual.

    - ¿Te encuentras bien?- Dije preocupada, por lo cual él volteó y me miró.

    - Sí, ¿por qué lo preguntas?

    - No sé, se te veía extraño. Cómo si estuvieras preocupado.- Doy un sorbo al café algo avergonzada por lo directa que había sido. Yo no solía serlo y mucho menos con chicos.

    - Sí tranquila, sólo es... cansancio acumulado.

Se le veía indeciso, se notaba desde lejos que algo pasaba. Su mirada ya no era tan intensa como siempre, esta ya no brillaba ni presumía de un perfecto color café. Algo le pasaba, estaba segura de ello.

coffee - dom.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora