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Anne.

Me encuentro caminando por las amplias calles de Madrid mientras reviso mis redes sociales, doy un mordisco al gofre que hace un rato me había comprado. Levanto la mirada volviéndome a encontrar con el mismo chico de siempre, este chica conmigo haciendo que mi gofre se caiga al suelo.

- Perdona, no miraba por donde iba.- Se disculpa al instante.- ¿Estás bien?

Asiento no muy decidida y observo el gofre, el cual se encuentra ahora mismo junto a mis pies.

- Te compraré otro.- Añade sin quitarme un ojo de encima.

- De verdad que no hace falta.- Murmuro no muy alto, pero si lo suficiente para que él me escuche.

- Me quedaría más tranquilo enserio. - Muestra una pequeña sonrisa.

Poso mi mirada por un segundo en él. Sonrío cómo una tonta al notar que por un momento este me sigue mirado.

- Espera un momento, ahora mismo vuelvo.

Me siento en uno de los bancos y comienzo a observar como la gente se para en los escaparates a ver los adornos navideños, los cuales ya están a la venta. Algo me saca de mks pensamientos, mejor dicho, alguien. Haciendo que desvíe la miraba hacia él, de este modo encontrandome a Daniel con dos gofres y con una sonrisa, cómo siempre.

- Gracias.- Rompo el silencio.

- No se dan.- Se sienta a mi lado.- Bueno, cuéntame sobre ti.

- No hay mucho que contar, me llamo Anne, tengo veinticuatro años y soy de Galicia, pero me mudé a Madrid hace cuatro años para poder acabar mis estudios. ¿Y de ti se puede saber algo?

- Porsupuesto.- ríe ante la absurda pregunta que le acabo de hacer.- Me llamo Daniel, Daniel Oviedo. Tengo 18 años, soy de Sevilla, pero me mudé de pequeño por trabajo de mis padres.

- Está bien.- Digo riendo sin saber que respuesta poner.

- Se me ha hecho tarde, debo irme, encantado Anne.

Tengo clara una cosa, y es que el día de hoy cada vez me está gustando más.

coffee - dom.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora