17. Promesa.

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Por la mañana, los dos chicos se levantaron para ir a sus diferentes actividades.

Nam Joon tenía que mudarse a la universidad para dar clases, y luego en la tarde, debía ir al Ministerio de Defensa. Por su parte, Jin quería hablar con Ken.

─ No quiero que vayas tu solo a verlo. ¿A qué hora te verás con él? – Le preguntó el Ingeniero Kim a su novio mientras se arreglaban, después de bañarse.

─ En la tarde. Tengo una cita en el hospital. –

─ Entonces te acompaño. Dime a qué hora irás y yo iré contigo. –

─ No es necesario y estás exagerando. Ken no es capaz de pegarme o ponerse violento, de hecho estoy seguro de que le alegrará que se termine la farsa. –

─ De todos modos iré contigo. Prefiero exagerar a pensar que algo te pueda pasar. – Lo abrazó mientras salían de la habitación para bajar a desayunar al restaurante del hotel.

Estuvieron juntos toda la mañana. Jin lo acompañó a ver los departamentos de la universidad y al final, eligieron uno muy cerca de donde vivía Hoseok, aunque los dos lo ignoraban.

Luego, fueron a comprar lo necesario para amueblar el lugar. Nam Joon insistió en que Jin eligiera los muebles, pues sabía que, muy pronto, vivirían en su casa.

─ Elige una cama muy grande, porque vamos a dormir juntos y quiero que te sientas a tus anchas, Jin. – Le comentó Nam Joon, pegando sus labios a la oreja del menor, y haciendo que éste enrojeciera.

─ Nam Joon. – Le reprochó, pero compraron una cama bastante grande, con un colchón demasiado cómodo.

─ Necesitamos mucho espacio. – Bromeó Nam Joon nuevamente, recibiendo un codazo del mayor.

Al fin, en la tarde, se separaron. El mayor quería ir a su casa y poder hablar con calma con su familia, para poder ir preparando el terreno respecto a Nam Joon. Seguramente se sorprenderían demasiado, pero necesitaba ver su reacción primero, antes de llevarlo en persona.

Lo conocían como al enemigo que les había quitado su casa, y ahora tendrían que aceptarlo como su yerno y sabía que quizás estas circunstancias les caerían mal.

Sin embargo, cuando llegó el departamento estaba vacío. Una nota en la cocina dirigida a él, le comunicaba que sus padres habían salido con Jungkook para comprarle ropa y algunas cosas que necesitaba.

En cuanto a Taehyung, desde la noche en que había regresado muy afectado después de hablar con Hoseok, se había encerrado en su habitación y no quería hacer nada más que dormir. Jin trató de hablar con él, pero no le abrió y tampoco pudo hacerlo después, pues el menor simplemente dormía cuando él estaba despierto y viceversa.

Toco la puerta de su recamara, pero Taehyung no contestó y viendo la hora, decidió cambiarse de ropa e ir a la cita con Ken. Nam Joon lo alcanzaría ahí.

Esperó en la entrada del hospital durante un buen rato, pero el ex capitán Kim no aparecía, así que Jin decidió entrar solo y acabar con ese asunto de una vez por todas.

─ Tengo cita con Ken. – Le dijo a la secretaria que lo miró asombrada.

─ Pero Jin. ¿Hiciste cita para ver a tu novio? – Le preguntó asombrada.

─ Siempre está demasiado ocupado, así que no me quedó de otra. Por favor, anúnciame. – Le pidió, sentándose en el sofá.

Ken abrió la puerta y miró a Jin, sintiéndose muy asombrado.

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