Nosotros dos

Capítulo 14. Era él.

"You can't wake up, this is not a dream"

Capítulo 14. Era él.

Jack, diciéndote la verdad, me has dejado con una intriga que no se me ha podido pasar en días. Con lo que me habías dicho de la sorpresa, no he podido dejar de imaginarme qué es lo que estás tramando. ¿Una canción? Qué cliché. Por favor, ¡dime!

-Blake.

Necesitaba decírselo. Me había quedado cuatro noches sin poder dormir bien del todo. Este chico cada vez me va matando de a poquitos.

Últimamente, me he puesto a pensar en lo que me dijo Nora hace unos días. ¿En verdad me gusta Jack?

No hay que quitar el hecho de que es sumamente, atractivamente, increíblemente atractivo-dejando los mente a un lado-, además es muy inteligente y me parece que para su edad es un chico muy maduro.

Sí, maduro. En verdad siempre a esa edad es que aparece el típico chico malo y guapo que quiere hacer de las suyas con todo el mundo.

No. Jack no es así. Y es que yo no sé qué es lo que tengo, no obstante, tengo como un «don» para conocer a las personas.

Casualmente siempre logro, con una simple platica o hasta a veces una mirada, me puede dar la definición de que tal y qué tipo de persona es.

Con él me di cuenta tan rápidamente que me quedé sorprendida. Él es tan adorable, tan buena persona...y siempre por mis maldito a errores hecho todo a perder.

Mi personalidad es una bipolaridad a morir. Siempre cambio depende a cómo se esté llevando el momento en el que estoy presente. Generalmente cuando no logro integrarme, mi estado de ánimo de va por el piso. En cambio cuando logro conectarme con los demás, me la pasó genial y puedo llegar a ser la persona más feliz del lugar.

A veces hasta me da miedo.

Al fin y al cabo...no tengo una respuesta clara a mis sentimientos. No, no la tengo.

No obstante, sería una estúpidez que yo le gustase a Jack. Es una tontería.

-¿Te gustaría ir a una fiesta? -me preguntó Nate tomando asiento a mi lado.

-No puedo. Tengo que estar pendiente al celular para saber cómo siguen mis amigos-respondí.

-Pronto te llamarán. Estarán bien. Ahora tú tienes que estar mejor, ¿y cómo hacerlo? Pues yendo a una fiesta.

-Me parece muy inmaduro hacer eso.

-¡Vamos Blake! -rogó-. Vamos con ¿Nora? -asentí-, y también con Sydney.

-No sé...mejor no.

-Tú quieres, di que sí.

Asentí al final.-Está bien, vamos.

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Al llegar a una fiesta, me encontré con una casa de las típicas de las películas de adolescentes. Llena de luces neón por toda la casa, con miles de vasos rojos tirados en el suelo y una música que estaba a punto de romper mis tímpanos.