Suaves Hojas Verdes

Un lamento

Narra Legolas.

El bosque negro nos acogia y daba la bienvenida con suaves soplos de viento mientras eramos escoltados por Leira y los demas soldados.

-¿Como sabes que tu padre le agradara mi prescencia?- escuche preguntar en un susurro a Aragorn; bien era cierto que mi Ada solia poner su orgullo siempre antes, pero ahora sinceramente no habia pensado en ello, mas bien pensaba el como reaccionaria al saber que...

-Mi padre puede ser un poco atemorizanre por su frialdad, pero no es una mala persona- dije sonriendo pero escondiendo mi cara en el pecho del general, su voz ya se escuchaba mejor, significa que ya se debe haber curado. -No debes preocuparte, seras bienvenido en el castillo.-

Al llegar, levante la mirada para poder ver mi hogar, la estructura del castillo era distinta al estilo que habia en Gondor, pero igual de acogedora. Mientras nos acercabamos a la entrada del castillo, el general Aragorn bajo de su caballo una vez que todos detuvieron su andar para dejarme pasar, despues fui ayudado por el mismo para bajar del corcel.
Nos adentramos al castillo, Aragorn detras de mi mirando hacia el suelo, era notable que se sentia incomodo por la mirada de enojo, tristeza y confusion de los que estaban dentro, esos sentimientos opacaron el alivo que al principio mostraron, todos se habian dado cuenta que los elfos que me habian acompañado jamas volveran.
Mi padre, siempre elegante y con aquella expresion vacia pero soberbia en su rostro nos recibio en el gran salon.

-Padre...- mi voz fue un susurro lleno de desolacion, por primera vez despues de tantos años, me senti como un niño. Un niño que necesitaba la proteccion y consuelo de su ada, para calmar su temor y llanto. Mi padre se acerco a nosotros ignorando olimpicamente a Aragorn...

-Legolas...- mi padre...me abrazo, era algo que me causaba mucha sorpresa, pues no era alguien que demostrara mucho cariño; pero al estar entre sus brazos no pude contener mi llanto y me aferre a el. Mi gente, entono un canto funebre por nuestros hermanos caidos.

Narro yo.

Aragorn al ver el ambiente que lo rodeaba comenzo a sentirse mas incomodo, nunca habia visto que tantos mostraran tanta tristeza hacia soldados caidos...claro, nosotros somos humanos ellos...elfos, ambos iguales y tan distintos a la vez; en silencio, encamino sus pasos hacia la salida del castillo donde se encontraba su caballo, el general se sentia aliviado al verlo sano y salvo, solo un poco agotado por la caminata...
Ambos elfos rubios notaron cuando el general humano se alejo en direccion a la salida, el principe Legolas inmediatamente llevo sus ojos azules al rostro de su padre con reproche grabado en ellos...

-Lo siento Hasufel, hice que te esforzaras mucho, pero nos salvaste- el general dio palmadas al cuello de su corcel, pero antes de que comenzara a caminar una voz lo interrumpio...

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lamento la tardanza u.u pero espero que les guste, ahora si tratare de continuarla mas mas seguido :3