Mis pequeños relatos

De vuelta a la realidad

Mucho tiempo pasó desde la última vez que observé el cielo. Lo único que eh logrado ver ha sido esa habitación oscura y pequeña, carente de ventanas e incluso de puertas o al menos eso creía. Invertí mi tiempo en imaginar como seria volver al exterior, olvide como había llegado allí en primera instancia, tampoco recuerdo mi nombre, pero cuando mi mente se cansaba en imaginar el estar afuera de allí, solo comenzaba a gritar "Auxilio", gritos desesperados y a la vez desgarradores e incluso le dedicaba horas de llantos. Aunque me preguntaba cada día de como me pasaban la comida, pero cuando desperté vi esa habitación negra, había una puerta que desde dentro o la pasé por alto en aquella oscuridad espesa, o quizá si entré en contacto con ella y por culpa de mi desorientación no me di cuenta, ¿qué más da? ¡Soy libre por fin!

Y ahora, ¿A dónde debería ir? No tengo teléfono, recuerdos vagos vienen a mi mente, pero no solo más que referencias a ciertos lugares sin sentido ahora para mí. Observo mi alrededor para descubrir un jardín, o al menos eso parece ya que esta plagado de flores, mi mente demora en reaccionar y decido salir de allí lo antes posible, pero mi cuerpo le está costando moverse, en aquella habitación era tan pequeña que no podía moverme, aunque con gran dificultad, logro dar un paso, la luz del sol me encandilaba y apenas lograba ver hacia donde me dirigía.

Con una suerte casi milagrosa logro llegar a la salida de aquí, mi sentimiento de satisfacción era inminente, a decir verdad nunca pensé que pudiese alcanzar el exterior, volteo a darle un ultimo vistazo aquél lugar pero.. Ya no está, desapareció y me sentí aliviado e incluso más tranquilo. Una vez logro llegar a la calle, un recuerdo con la fuerza de un choque de automóviles viene a mi, ¡si, reconozco ésto! Mi casa está hacia la derecha, no muy lejos de aquí, debe de estar a unos metros. ¡Allá voy! Ya quiero ver las caras de mis familiares cuando llegue a casa.

Comienzo a caminar por ésta vereda hacia mi destino, luego de haber echo aquel milagro de caminar hacia la salida, ya caminar se me hizo muy fácil. ¡Ja! Solo tenia que ser paciente y saldría de allí, y ahora me dirijo de vuelta a casa, mi felicidad es superior a todo lo que antes eh sentido. A la vez que avanzo voy consiguiendo recuerdos de mi niñez, pero no todo esta muy claro aun, lo que logro entender de lo poco que se, es que no era muy querido en ese tiempo, ignorare eso por ahora mi objetivo es llegar a casa.

Ya llevo 10 minutos caminando y a lo lejos logro ver una figura que me parece muy familiar, ¡que emoción! Ya falta menos, aunque me parece curioso que no haya nadie caminando, más aún me sorprende no ver ningún vehículo cerca, mejor dicho, no se ve a nada ni nadie por ningún lado, las casas no parecen abandonadas. ¡Arg! Debo de olvidar ésto y céntrate, estoy tan cerca.. ¡Vamos! Incluso fuera de esa habitación me siento de alguna manera preso, pero lo mejor es llegar a casa y pensar todo calmado.

Uf.. Suspiro frente a ese hogar familiar para mi, me acerco de a poco a la puerta, pero por alguna razón al igual que al principio se me estaba volviendo casi imposible, pero con mucho esfuerzo logré moverme hacia la puerta y cuando toco el pestillo.. Lo recordé todo, del por que estaba allí en esa habitación, del por que había decidido olvidar todo, así que entro sin dudar y allí está ella, su cara de pocos amigos lo dice todo, aún sigue igual como cuando me fui, no duda en darme la espalda por lo que había echo, si.. Allí estaba mi mascota, estaba enojada porque no le eh alimentado, lo que es extraño, recuerdo haberle dicho a mi amigo que lo alimentara en mi ausencia, debe de estar aquí, eso explicaría porque la puerta estaba abierta, me dirijo a mi habitación en el segundo piso de la casa después de darle de comer a mi perrita favorita.

Allí estaba el vago de mi amigo durmiendo en la cama, se nota por su pinta que ha estado de duelo como yo, después de todo.. Nuestras personas más importantes venían a vernos a esta ciudad, aquí nos conocen todo el mundo y nosotros a ellos. ¿1 mes habrá pasado? Exactamente mi mente estaba agobiada, me encerré en mi propio mundo, me aísle de todo para olvidar el dolor, fui al cementerio y me quede ahí esperando cualquier oportunidad para traer a esas personas a la vida de nuevo. Saludo con un abrazo a mi dormido vecino y amigo, y vuelvo a la entrada de mi casa para ver a todos nuestros vecinos, conocidos y algunos amigos más, no los vi al llegar, sólo estaba centrado en recordar todo y llegar a casa, pero es mi momento de decir algo a todos que me observan preocupados por mis pintas.

- ¬¡Gracias a todos por asistir! - La voz me tiembla pero no me romperé. - Éste tiempo fue duro para nosotros, pero hay que seguir adelante.. - No quiero llorar, no voy a llorar. - Los veo mañana a todos, hasta mañana.

Logre aguantar el llanto, ahora ese lugar oscuro de nuevo se me presenta delante, pero esta vez.. Se vuelve mas grande, deja de ser negra y densa, se convirtió en una casa acogedora y es la imagen de mi casa.

Es bueno siempre volver a la realidad y enfrentar los problemas con los que uno se enfrenta,
siempre en algún momento logras escapar de allí y transformas algo doloroso
en algo que te convierte en alguien mucho mas fuerte.