Sólos

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Hacia un bonito día y Naruto cocinaba contento el platillo favorito de sus dos Uchiha, quería llevarles el desayuno a la cama,mimar a sus dos razones de vivir. Mientras preparaba las bebidas pensó en qué debía tomar decisiones, no podía dejar su negocio y casa así nadamás, había luchado tanto; pero tampoco deseaba pedirle a Sasuke qué abandonara todo en Japón para vivir con él, aquello le parecía sumamente egoísta. Unas manos en sus caderas le regresaron a la realidad, cerro los ojos y apoyo la cabeza en el pecho varonil de Sasuke

—esperaba abrir los ojos y ver tú dulce rostro aún dormido — sasuke depósito un beso sobre la clavícula expuesta de Naruto, que en respuesta al estímulo gimió bajito — N-no hagas e-eso, Sora podría encontrarnos y-yo... — Naruto se sonrojo al sentir la entrepierna de Sasuke en sus glúteos, una aplastante ola de calor viajo por su estómago, se apartó antes de que el razocinio le abandonara y terminara cediendo a sus propias necesidades.

—Pe- pensaba llevarles el desayuno a la cama — el rubio tartamudeaba, sus ojos estaban clavados sobre la tela del pantalón que sasuke portaba, la erección del azabache era notoria y bueno el no era precisamente de palo, literal el dulce rubito tiraba baba

Sasuke sonrió con altanería, decidió que hacerse desear por el momento estaba bien, ya se las cobraría  — entonces, regresare con Sora— Sasuke paso a lado de Naruto y le acaricio la mejilla — después seguimos jugando.

Naruto parpadeo para despejar sus pensamientos — en un momento estoy con ustedes— fue lo único que respondió antes de ver desaparecer por las escaleras a Sasuke.

El leve sonido de campanas llegó hasta sus oídos y miro la hora ¿quien podría ser tan temprano? Dejo la charola sobre la mesa.

—Buenos días hijo, espero no interrumpir, pensé en pasar más tiempo con ustedes, mañana regresaré a Japón—

—Papá, es qué — Naruto miro las escaleras, ya habían hablado sobre Sasuke pero de ahí a tenerlo bajo el mismo techo...

Minato vio la duda en los ojos de su hijo — Se que Sasuke está aquí, ha venido junto conmigo, sólo le pedí tiempo para solucionar las cosas contigo.

Naruto elevó una ceja, vaya las sorpresas no terminaban.

—Entonces pasa, pensaba llevar el desayuno a la cama pero hay cambio de planes.

—No, mejor regreso más tarde y... —Naruto le cubrió la boca

—No digas tonterías papá, dije que el desayuno sería familiar y así será, ahora espera aquí, mientras voy por Sora y Sasuke

Veinte minutos después Naruto fue testigo de lo que alguna vez creyó imposible. Un saludo amable entre su padre y el amor de su vida.

Sora brincaba de un lado feliz.

— Naruto,me gustaría llevar a Sora al parque— Minato quería dejar a la pareja a solas y era cierto que deseaba pasar tiempo con su nieto antes de partir de nueva cuenta a su ciudad natal.

— Shi! Mami, pometo ser buen niño!  Y me llevaré a Kuama también.

Naruto lo pensó un poco antes de acceder con una sonrisa— llamaré a Kakashi él los llevará a la plaza  central.

En la puerta Naruto término de arreglar la bufanda de Sora y aseguro la correa de Kuruma — no sueltes la mano de tu abuelo.

Sora rodó los ojos, era según el pequeño la décima vez que su oka-san le repetía lo mismo — shi, ma'

Obedece a tu papi Sora —Sasuke sonrió por los gestos de su hijo.

—Shí  oto-san — dijo en tono solemne, quizá tener la figura paterna tenía después de todo buenos efectos.

Naruto llevo la mano a su boca para disimular la risita que se le escapó.

Ambos padres agitaron las manos para despedir a su pequeño travieso.

—Creo que tenemos casa sola—  Sasuke intento sonar casual, pero el tono ronco había expuesto las dobles intenciones.

La cara de Naruto por supuesto se volvió de un carmín intenso.

—P-pues lamento ser yo quien arruine tus planes, debo ir al restaurante, quizá si terminamos antes podamos pasar un rato juntos

— ¿No tienes algo así como una persona  de tu entera confianza?— Sasuke había empezado a olisquear el cuello de Naruto, tratando de convencer al rubio de quedarse con él en casa.

— S-si — Naruto mordió parte de su labio inferior y apretaba los ojos intentando no soltar un suspiro de excitación — pero h-hay co- cosas que pedir y ah~ —Naruto no pudo evitar que ese gemido se escapara, Sasuke había lamido el lóbulo de su oído y la descarga eléctrica viajo por toda su columna vertebral.

—Tu quieres ir, pero tu cuerpo ya a decidido donde quiere estar— Sasuke beso a Naruto enviándole el mensaje de sus ganas de tomarlo y reclamarlo de nuevo como suyo. De Uchiha Sasuke.

— ¡ngh! Exclamó el rubio mientras  enredaba las piernas sobre la cadera de Sasuke, rozando su miembro con el del azabache— en la alcoba a- aquí no Sasu — gimió

La ropa de ambos se encontraba esparcida por todos lados, algunos objetos como lámparas y cuadros se encontraban en iguales condiciones y los gemidos era lo único que se escuchaba dentro de la habitación que Naruto ocupaba mientras estaba sólo. El sol había caído y los primeros rayos naranjas que anunciaban el inicio del anochecer despertaron a Sasuke, quien después de aclarar la visión acarició la mejilla de Naruto, habían hecho el amor por más de cinco horas y en medio del último gemido de éxtasis del rubio le había dicho que lo amaba y deseaba pasar el resto de sus días a su lado.

— Pronto, serás mi esposo—las caricias continuaron sobre la canela, luego las manos fueron reemplazadas por los húmedos labios del azabache

—No puedo creer que aún quieras continuar— dijo con la voz un tanto disfónica.

— Puedo solo si tu quieres — dijo Sasuke en tono algo sugerente

— Tonto— Naruto se levantó y tomando una toalla se dirigió al cuarto de baño.

Sasuke se deleito con el movimiento de caderas de Naruto mientras le daba la espalda y se dirigía a tomar una ducha.

¡Wow! Tengo una excelente vista, creo que tomaré esa ducha contigo Naru.

Esto está algo corto y sin lemon.
No se qué más pasa con este tema.
Ya está por terminar todo esto.
Muchas gracias por leer.
Cualquier error les agradecería me lo dijeran para corregir.

Las quiero.
Felices fiestas

IncondicionalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora