Mentiras y sexo -Harry y _____- (terminada)

Capitulo 36 (final)

Timmy estaba en el garaje que utilizaba como taller. _____ tuvo que pestañear para acostumbrarse a la tenue luz con la que trabajaba.

-Hola, _____ -dijo Tim, alzando la mirada del clavo que estaba clavando-. Vaya, lo necesitaba, ¿quieres echarle una mirada al plano de ese prototipo?

-No, ahora no. Quería hablar contigo sobre Blaine.

-¿Blaine? ¿Qué ha pasado con Blaine?

-Quiero hablar de cómo consiguió mi dinero - dejó que las palabras flotaran en el aire mientras recordaba lo furioso que se había puesto Timmy con Blaine y las muchas veces que le había repetido que le pagaría lo que Blaine le había quitado. Timmy desvió la mirada. -¿Cómo consiguió Blaine mi dinero,Timmy?

-Blaine era un canalla -contestó Timmy, moviendo de forma notoria la nuez-. Perdió tu dinero.

-Sí, ¿pero cómo lo consiguió,Tim?

-¿Me estás acusando de algo?

-¿Crees que te estoy acusando de algo?

Y entonces Tim se dejó caer sobre el taburete, apoyó los brazos en el banco sobre el que trabajaba y la cabeza en las manos.

-He querido decírtelo muchas veces. Blaine lo hacía parecer como una oportunidad genial. Pensé que duplicaría tu dinero y que sería como una especie de regalo por todas las veces que me habías ayudado.

-¿Robaste mi dinero y has dejado que durante todo este tiempo le echara las culpas a Blaine?

-Fue un canalla, te abandonó. Y no me habló de los riesgos de esa inversión. Nos robó a los dos. Sabía que si te enterabas de lo que había hecho, te sentirías mucho peor. En cuanto se venda mi invento, te lo devolveré todo, te lo juro.

-Tim... -era un hombre adulto, pero continuaba siendo como un niño. Un soñador y una persona inestable, como lo había sido su padre-, deberías habérmelo dicho, deberías haber sido sincero.

-Lo sé.Todo esto ha estado matándome... Perdóname, _____ -lo miró destrozado, esperando su perdón-. Te lo devolveré todo. Estoy seguro de que este proyecto va a funcionar.

-No, Tim, esto tienes que pararlo -señaló a su alrededor-. Esto es una afición. Lo que tienes que hacer es ir a la universidad, sacarte un título y conseguir un trabajo. Después irás pagándomelo mes a mes, como si fuera un préstamo bancario.

-¿Qué?

-Ya es hora de que te hagas responsable de tu propia vida. Págale a mamá un alquiler, o, mejor aún, vete de casa. Comienza a hacer las cosas por ti mismo.

-Yo pensaba que creías en mí.

-Y creo. Creo que eres una persona inteligente y creativa y quizá algún día consigas vender alguno de tus inventos, pero, de momento, tendrás que ganarte la vida, como lo hace todo el mundo.

-¿Vas a decirle a mamá lo que hice?

-No, vas a contárselo tú. Y creo que a partir de ahora deberíamos empezar a decirnos lo que de verdad necesitamos oír.

Estuvo hablando con él durante un buen rato, animándolo, y después lo dejó sentado en su taller, desconcertado y un poco asustado. Sabía que su hermano saldría adelante, de la misma forma que lo estaba haciendo ella, abriendo los ojos a lo que realmente eran las personas y no a lo que quería que fueran. AJ tenía razón. Ella prefería edulcorar la verdad a enfrentarse a ella. Había estado tan asustada como AJ, pero no se había dado cuenta. AJ se creía incapaz de comprometerse, pero había ido a buscar a su antiguo novio para ayudarla a sentirse mejor. Y lo había hecho por amor. La amaba. Era una experiencia nueva para él, pero estaba dispuesto a hacerla funcionar. Y ella le había negado esa oportunidad. Y no era sólo de su amor por AJ de lo que se estaba escondiendo. También se había estado engañando sobre su columna. Ella no era una mujer de aventuras, ella era una mujer tímida y seria para la que el sexo era algo mucho más importante de lo que pretendía. Y de pronto aquella columna dejó de tener importancia. Le diría a Will que la contratara para hacer artículos y si no quería, comenzaría a trabajar por libre. Y hasta entonces, tendría que escribir su última columna. Que sería la mejor.