Drabbles Prumano

Ninna Nanna

N/A: Antes de que empiecen (???) Primero que nada ignoren el hecho de que en el vídeo estén chibiromano y jefe España, pasa que amo muchísimo ese video y así encontré la canción (?) Vale la pena verlo ; v ; ♥ ADEMAS DE QUE LA CANCION ES BELLISIMA BASTA AAAAAA

Y segundo y último, quiero que este cap me quede un poco largo aunque lo dudo, haré lo mejor posible para que me quede bien ; v ; 9 O sea, mas que drabble seria oneshot (?)

Nada eso, espero lo disfruten ♥

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Era una noche helada. 

Como era invierno, anochecía más temprano y el frío aumentaba, a pesar de que estar en Italia y que este país pareciese cálido aun estando en esas fechas. 

Y desde hace ya unos años que Prusia y Romano eran pareja. 

Todo iba bien, demasiado a decir verdad. Se conocen desde hace siglos pero nunca repararon mucho en la presencia del otro. Es mas, Prusia varias veces quiso hacerle pelea, aunque Italia del Sur siempre terminaba escapando, asustado. Años después el prusiano se lo encontraba siempre en la casa de su mejor amigo español. 

Y los años pasaban, y ellos se veía desde la lejanía. Aunque, con el tiempo, esa lejanía se redujo a metros, y esos metros a centímetros. A medida que pasaba eso, su relación mejoraba. Comenzaron a hablar ( un día friolento, como este, pero en la casa del alemán), luego a tener pequeñas salidas como amigos cada tanto. Lentamente pero con seguridad se empezaron a enamorar, a descubrir cosas que nadie mas sabe del otro.

Que solo ellos sabían, y se sentían especiales con la presencia de la otra nación. 

Ya no eran solamente "Los hermanos mayores de Alemania/Italia", tampoco "la sombra de una nación". Simplemente eran Gilbert Bielschmidt y Lovino Vargas. 

Ya no se sentían solos, porque sabían que le importaban a alguien y que ese alguien lo amaba. Y eso era lo que les importaba.

Por lo que, hace no mucho, decidieron mudarse a vivir juntos. 

Obviamente en esos años que llevan de pareja se iban unos días a la casa del otro, pero llegaron a un punto donde viajar los agotaba y decidieron hacerla mas simple: Prusia se mudó a Italia del Sur, a un pueblo llamado Puglia*. 

Y la verdad, la primera vez que puso un pie ahí, años atrás, ya tuvo ganas de quedarse.

Pero a pesar de ya haber estado ahí, en esa casa, en otra habitación al inicio y ahora en la cama con el italiano, a veces le costaba dormir. 

Porque aunque esté en otra casa, en otra cama, no quitaba el hecho de que seguía teniendo pesadillas. Pesadillas en las cuales se veía a si mismo cuando aún era una nación, cuando era importante y poderoso. Veía como poco a poco pasó de ser alguien con poder, a ser lo que era ahora, nada. 

Esa misma noche fría, donde las estrellas y la luna brillaban sin preocupación alguna, la ex-nación despertó sobresaltado. 

Se sentó en la cama apenas abrió los ojos, estando estos abiertos completamente aterrados. Su respiración era agitada y su pecho subía y bajaba al ritmo del aire que entraba y salía de sus pulmones. Una mano temblorosa se acercó a su rostro y tapó la mitad, aún se encontraba asimilando su sueño.

Bueno, pesadilla.

Más que pesadilla, recuerdo. 

Sintió una suave caricia en su otra mano y rápidamente su mirada se dirigió a esta, viendo como agarraba las sabanas con fuerza y desesperación. Las soltó lentamente, a medida que las caricias en esa mano seguían, siendo suaves y cariñosas.