Me despierto exaltada y desorientada,pero al mirar al rededor me doy cuenta que por suerte todo fue una pesadilla.Hace días que no tenia ninguna,pero supongo que es algo con lo que tendré que vivir,agarro de mi mesita de noche ese frasquito naranja,que se me hizo tan familiar desde hace unos meses,tomo dos pastillas en seco mientras trato de regularizar mi respiración.
Me acuesto de nuevo y miro la hora en el despertador.
¡Genial Elizabeth son las 3:45 de la madrugada! ¡Eres una genia por despertarte a esta hora!- Me dice esa vocecita que esta en mi cabeza que dice que es mi conciencia.
-¡Ay Dios,ya cierra la maldita boca!- Le contesto.
Sabes que tengo la maldita razón,y no digas que me calle- Me dice.
-Eres tan insoportable- Le contesto con voz cansada.
Entonces tu también lo eres ya que yo soy tu- Me dice con burla.
-Agggghh!- Gruño al darme cuenta que tiene razón.
Luego de seguir peleando con mi estúpida conciencia,es decir conmigo misma,me quedo dormida no se en que momento; Pero lo que si se es que llego tarde al trabajo y como el estúpido autobús aun no viene,en este preciso momento estoy corriendo por las calles repletas de vehículos para llegar lo mas rápido posible.
Estoy a una cuadra del bar en donde trabajo,porque si señores y señoras trabajo en un bar y adivinen ¿de que? Si señoras y señores ¡de mesera! Gracias por los aplausos,lose mucho sarcasmo para la mañana pero todo es culpa del estúpido despertador,en fin volviendo al tema,ya llegue al trabajo. Entro corriendo a los vestidores y me pongo el uniforme que consiste en una especie de camisa mangas cortas mezclado con una falda ,aunque para ser exactos es un vestidito,si,eso es! es un vestidito-delantal. Menos mal que la próxima semana cambian el uniforme a un simple delantal.
Termino de arreglarme y salgo para empezar mi turno.
-Otra vez tarde Weber- Me dice Cecilia,la odiosa,malhumorada y gorda encargada del bar.
-Lo lamento señora Kener,el autobús no llego y por eso me retrase,no volverá a pasar- Digo tragando mi orgullo y mi enojo.
-Te quedaras a hacer horas extras para recompensar esta semana- Me dice con arrogancia,mirando sus horribles uñas postizas.
-Si señora Kener- Es lo único que digo,ya que necesito el empleo.
-¿Y que se supone que haces todavía parada aquí?¿Quieres un abrazo motivacional o que? -dice viéndome con asco- Mueve tu maldito trasero y ve a trabajar que para eso te pago- termina de decir y se va moviendo toda su grasa corporal.
-Maldita gorda antipática- digo entre dientes.
Escucho una pequeña y aguda risa atrás de mio y ya se de quien se trata.
-No te atrevas a decir nada o golpeare tu pálido rostro Anne -le advierto. Anne es una de mis pocas amigas,la conocí aquí en el bar el día que empece a trabajar.
*flashback*
Hoy es mi primer día de trabajo y ya estoy llegando tarde. Corriendo voy al bar,ya que no tengo auto y el bus no llegaba mas. Al llegar voy directo a los vestidores para cambiarme,pero mi camino se ve interrumpido,ya que por mi corrida atropelle a una chica que llevaba bebidas en una bandeja.
-Mierda -decimos al mismo tiempo.
Me levanto,dándome cuenta que estoy empapada,y ayudo a la chica que aun esta en el suelo.
-Lo siento -le digo mientras la ayudo- Venia muy rápido,estoy llegando tarde -le explico.
-Ah,tu eres la nueva ¿no? -asiento sacudiendo ropa- Soy Anne Jones,soy tu compañera de trabajo -dice tendiendo su mano y con una sonrisa en su cara ¿como puede sonreír estando toda manchada?
-Elizabeth Weber -digo correspondiendo su saludo.
*fin flashback*
-Alguien vino con su dosis de sarcasmo muy cargada -dice la morena riendo atrás de mi.
-Culpa del despertador -digo mirándola de reojo.
-Ya veo -dice mientras se para junto a mi- Cada vez que llegas tarde me dices pálida sabiendo que soy morena. Estoy empezando a creer que eres daltonica o algo así -dice pensativa. La miro con una ceja alzada.
-¿Que? -pregunta inocente.
-Nada Anne -digo rodando los ojos- Mejor vamos a trabajar antes de que miss alegría nos regañe -le digo con sarcasmo.
-Jajaja,tu dices eso por que no te dio el abrazo -dice riendo mi amiga.
-¡Oh,si,claro,por eso es! -digo con mas sarcasmo- Ya,vamos a trabajar Anne -le digo arrastrándola a la barra.
El día pasa entre pedidos,osea bebidas,pasteles,galletas,etc,viejitas y viejitos amables,hombres y niñatos pervertidos,mocosos malcriados y niñas pijas.
Por fin mi turno llega a su fin,termino de limpiar las mesas del rincón y solo quedan las del medio.
-Adiós Elizabeth,nos vemos mañana -dice Anne con una gran sonrisa (como siempre) mientras se coloca su campera.-No te quedes hasta muy tarde divirtiéndote con las mesas -dice burlándose mientras se va.
-Adiós Anne,gracias por tu gran ayuda -digo con ironía.
Ella agita su mano en mi dirección y se va.
Luego de limpiar el resto de las mesas y el piso,por fin termino y puedo irme a casa. Cierro el bar y me pongo mi campera de cuero para resguardarme del viento. Voy a casa caminando,no tengo paciencia para esperar el autobús hoy, y aunque esta oscuro y desolado mis ganas de esperar el autobús no aparecen.
Al cabo de unos muy largos minutos llego a mi casa,en realidad es un departamento,pero como yo vivo ahí,le digo casa. Al entrar saludo al señor de la limpieza con un gesto y el de igual manera con una sonrisa; En la puerta del ascensor hay un cartel que dice que no funciona.
-Genial,este día solo mejora -me digo a mi misma mientras subo las escaleras.
Al llegar a mi piso,voy a mi puerta,saco la llave y entro. Tiro la mochila al suelo y me voy desvistiendo de camino al baño. Me ducho con agua bien caliente para relajarme,al terminar me seco y me pongo la ropa interior,el piyama y me acuesto a dormir,a los minutos me quedo dormida profundamente pensando que mañana sera un largo día.
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Sin Mirar Atras #Wattys2018
Short StoryCuando Elisabeth logra escapar de aquel lugar ya no es la misma,con sus 19 años tiene mas experiencia que cualquier chica de su edad. Ella sabe como defenderse,es lo único que no se arrepiente de haber aprendido.. Quiere empezar de cero,y para eso...