La despedida

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Cuando Piers volvió, ella decidió que quería pasar más tiempo con él. Aunque él estaba un poco ocupado buscando a Chris, pudieron pasar tiempo.

Ella se fue a vivir con él temporalmente, hasta que él encuentre a Chris y haya otro incidente. Esos 6 meses fueron muy bonitos, ya se podría decir que él estaba enamorado de Alice y se notaba. Aunque la muerte de Merah le seguía doliendo, él supo apreciar más a Alice. 

Al principio eran tímidos, pero terminaron hasta durmiendo juntos. Jugaban a juegos de mesa, veían películas o jugaban videojuegos cada noche. Realmente era un amor muy fuerte el que tenían. Lo único malo es que ninguno se atrevía a dar el primer paso. 

Cuando Piers encontró a Chris, lo hizo acordarse de todo. Era un borracho o "perro callejero" como le dijo la camarera. Entonces decidieron investigar el incidente en Lanshiang. 

¿Nadie le pudo haber dicho a la pobre Alice que esa iba a ser la "última" vez que lo vería? Alice tenía un muy mal presentimiento. Piers le dejó su casa para que la cuidara. Y ella le dio un amuleto para que la recordara a ella, recordara lo fuerte que es y  que era capaz de todo. Antes de irse, el castaño decidió despedir a Alice de una forma hermosa. Se acercó a ella y le dio un beso apasionado en los labios. Al principio, ella estaba sorprendida, pero en cuestión de segundos, se dejó llevar por los dulces labios de Piers. Él, le dijo al oído:

Piers: Sabés, me guardé esto por mucho tiempo. Te amo Alice, cuando vuelva, vamos a arreglar todo esto que nos tiene confundidos y vamos a ser felices.

Alice se sonrojó, lo abrazó y le dijo también susurrando:

Alice: Y-Yo... Yo también te amo. Muchísima suerte, lo harás genial. Y espero que no te pase nada. No sé que haría sin ti. Roger Piers Nivans, has robado mi corazón desde el primer momento en que te vi.

Piers le dio un beso en la frente y con lágrimas en los ojos se marchó.

Alice fue fuerte en ese momento, pero cuando llegó a la casa de Piers se quebró en llanto. Él... Él la amaba. Y se lo dijo. Ahora solo era cuestión de esperar y esperar, pero ella no sabía que el destino tenía un juego sucio preparado.

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