Un compromiso erróneo, ¿o no? (Altaïr Ibn La Ahad Y Tu)

Capítulo 3: A enfrentar lo que toca🗡💋

Narra Altaïr:
Luego del discuro, me dirigí a donde se encontraba Al Mualim, cuando me vio me hizo una seña para que me acercara.
-Altaïr, sabes que las asesinas están en camino, cuando lleguen quiero que ambas Ordenes se unan, haciendo que la hermandad de los asesinos sea más fuerte que nunca. Pero ellas vienen de un país muy diferente y para unirnos a ellas, puse una condición, una petición mas bien cultural-
-Creo que está bien, las chicas deben acostumbrarse a nuestras costumbres, después de todo están en nuestro país no en el suyo. Pero dígame Maestro ¿Cuál fue esa petición?-
-Bien Altaïr, como sabes estamos divididos por sexo, creo que lo más descente para una unión sólida y duradera es un matrimonio. La Mentora Hubier me ha dado la mano de su mejor asesina, y yo te la daré a tí muchacho-
-Disculpe mi atrevimiento pero, ¿Realmente cree que si yo me caso con esa mujer, el matrimonio resulte? Es decir, venimos de culturas muy diferentes, usted mismo lo dijo, son mujeres fuertes y con mucho carácter; nosotros estamos acostumbrados a mujeres sumisas, realmente no se si sea capaz de ver mujeres haciendo el trabajo que normalmente hacemos nosotros-
-Hijo, esas mujeres vienen de nacimiento con la marca asesina, han echo los mismos trabajos que nosotros desde siempre, saben como luchar, como asesinar, como ser sigilosas y letales, no las subestimes, no te lo estoy pidiendo Altaïr, no te estoy pidiendo un favor, te estoy informando sobre la decisión que tomé, en otras palabras te estoy exigiendo que lo hagas-
-Si Maestro, pero no quiero que esa mujer se me acerque, yo no seré niñera de nadie-
-Jajajaja jovencito cuando la conozcas sabrás que no hay ninguna razón para ser su niñera, ahora ve a asearte no deben estar muy lejos de aquí, quiero que tenga una buena impresión de tí-
Pff no podría ser mejor, tendré que casarme con una mujercita débil e insignificante.
Me fui del despacho de mi maestro e hize exactamente lo que me pidio, me arregle y me dispuse a esperar a que llegara esa zorra. A medida que pasaba el tiempo mi humor empeoraba, realmente no quería saber nada de esa mujer, por más asesina que fuere.
Narra______:
Habíamos llegado, me bajé y comencé a caminar detrás de mis compañeras.
Afuera habían hombres cuidando la entrada, me imaginé por su ropa que eran asesinos, nos abrieron las puertas y entramos.
Nos miraban con mucha seriedad, yo hacía lo mismo, estaba de muy mal humor. No me vendría mal intercambiar golpes con alguno de estos inútiles.
Nos adentramos en la Cuidad, muy humilde a decir verdad, las casas, las personas, todo se veía empobrecido. Parece que el pueblo había pasado por muchos conflictos, por supuesto causados en parte por la presencia de los asesinos.
Sin darme cuenta llegamos a una especie de castillo o fortaleza, nos estaban esperando, abrieron las puertas.
Apenas abrieron me quedé paralizada, no podía mover mi cuerpo y sinceramente tampoco quería, apenas entrara mi vida estaría condenada a un matrimonio, mi carrera de asesina se iria al demonio, todo mi esfuerzo y mis habilidades se irian al demonio.
Hubier se percató de que me estaba quedando demasiado atrás, asi que me agarró por los hombros abrazandome y me hizo caminar con ella a mi lado.
En ese momento solo quería desaparecer, que me tragara la tierra, es un destino mejor que el que me esperaba dentro de ese lugar.
Mientras caminaba, cerré mis ojos. Mi Mentora me detuvo y entonces supe que ya estaba ahí, ya no tenía oportunidad de escapar, solo quedaba hacer frente a lo que me tocaba.