Capítulo 19: Nostalgic

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La transparencia tiñe el cielo nocturno, y
Camino solo por el sendero que siempre lleva a casa.

Cantándome a mí mismo, quiero enviar todos estos sentimientos
A ti en tus sueños.

Me enredo en algo, Me estoy poniendo un poco enfermo de mí
Enredado en los sentimientos que me transmiten esos días que
había dejado atrás...
El corazón que me ha olvidado en alguna parte esta empezando
a doler un poco.
Sigo buscado una noche iluminada por las estrellas que están
vinculadas a este momento.
Puse mis sentimientos en el retroceso de las nubes
En el camino a casa, donde me detengo a estar.
Eres una parte de mi continuo sueño,
Yo se que (estos sentimientos) posiblemente no puedan alcanzarte
desde aquí.
Las lágrimas siguen cayendo, solo por poder estar cerca de ti,
Estoy empezando a querer una sonrisa, solo un poco...
Alguien hace preguntas, estoy empezando a querer que esto
tenga más sentido.
Echaste todos esos días demasiado brillantes en una descolorante
sombra.

En un lugar muy lejano de la tierra, a millones de galaxias de distancia, un ser muy poderoso había sentido la presencia de dos gemas del infinito, movido por su férreo deseo de completar su colección y hacerse del poder, tenía en la mira ese pequeño planeta. Recordó que ya antes había enviado una pequeña invasión con parte del ejercito Chitauri que cedió a Loki.

Loki, ese chico embustero iba a pagar caro el haberle fallado y eso que él, le dio lo que quería, la ubicación de sus gemelos. Le haría pagar destruyendo todo cuanto amaba. Dio la orden a su hija Nébula, la que le quedaba, seguía enfadado de que su favorita Gamora, se hubiese puesto en su contra.

Él la creía un perro entrenado, pero algo fallo, afortunadamente Nébula, era más leal, o al menos eso creía él, pero ella estaba más a favor de Ronan, que del de su padre adoptivo. Aun así, el titán, era una potencia muy fuerte. Pronto invadiría ese planeta azul y se llevaría sus tesoros, no sólo las gemas del infinito que ubico en el lugar, si no a aquel hermoso omega, que el oráculo le había mostrado. Aquel a quien quería para satisfacer sus deseos.

Si bien el oráculo se lo enseño, mostrándole que él sería su más grande enemigo, porque era el corazón de aquella maquina llamada vengadores, aunque ni ellos lo supieran.

Thanos, sabía muy bien de los vengadores por aquel primer ataque de los Chitauri. Les acechaba desde entonces y el momento de hacerles una visita estaba cerca.

Conquistaría ese mundo, tomaría sus gemas y buscaría venganza contra su traidora hija y el último de los Jotun. Aún tenía cosas que arreglar, pero podía empezar a causar problemas y castigar a Loki. Alguien más quería verlo destruido. Sería bueno que les enviase un adversario poderoso capaz de dejarlo herido, un enemigo que provocaría división entre algunos de ellos y luego cuando Migdart estuviese rota y frágil al igual que él hechicero, él llegaría a asestar el golpe final.

Fue a su bóveda y contemplo con regocijo sus gemas. Tomo una y utilizo su poder para enviar cierto mensaje. Un choque directo a las ondas cerebrales de su poderoso siguiente peón. Bueno más bien este sería un alfil en su juego.

Thor se presentó en el cuartel general de Shields, quería una explicación y la quería ya. Buscaba a Natasha, la única que quedaba con ellos y de manera indirecta de los que fueron los vengadores. Sabía que visión seguía en la iniciativa, pero él vivía en la torre Stark, ya lo visitaría más tarde.

La rusa no comprendió muy bien las interrogantes del Asgardiano, pero le hablo de la Civil War y sus motivos, de las causas y consecuencias. Aunque seguía pensando en Loki y como no, si pensaba en él cada cinco minutos, despierto o dormido y lo cierto era que eso no le molestaba, así que no hacía nada por evitarlo, él lo consideraba la simple y noble preocupación de hermano, ok, no era solo eso, a veces pensaba en cosas distintas, pero dado que no eran hermanos, ya no se sentía avergonzado por eso o no tanto.

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