Perdón

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Dedicado a   Valentina_17_, Luz_CMi, carmencey, iioseliin , gracias por la paciencia y el apoyo, sin sus comentarios esta historia jamás hubiera avanzado.

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El celular vibró en su pantalón cuando estaba a punto de subir a su auto, luego de dejar a Seulgi en su casa, así que decidió contestarlo antes de manejar otra vez.

—¿Estás bien? —fue lo primero que pregunto al ver quien lo llamaba.

—Si, todo bien —respondió Wonwoo por el auricular—. Jun, te llamaba para hacerte una pregunta.

—Claro, dime.

—¿Te acuerdas del teléfono que deje tirado en tu casa hace años? —preguntó mientras el semáforo indico que parará.

—¿El qué me dijiste que botara? —Wonwoo contestó con un ujum a su pregunta— Pues lo bote, no sé donde estará ahora.

—Ya veo.

Esa fue su simple respusta, estaba pensando en demasiadas cosaa como para dar una respuesta más larga, cuando noto el semáforo en color verde arrancó el auto.

—¿Por qué el repentino interés en ese teléfono? —se recostó contra la puerta de su auto.

—Nada en particular— dio una vuelta en U en una de las calles—, ahora tengo que ir a resolver unos asuntos, más tarde hablamos.

—Ok, te amo y cuídate.

—Tú también cuídate —colgó el teléfono, nunca le había logrado responder el "te amo" de Junhui y se sentía un poco culpable por ello.

Viró en una esquina lo más rápido que pudo, sabía a dónde se tenía que dirigir, por alguna razón desconocida su mente le pedía que compruebe lo que había dicho Mingyu. Aunque de momento y para ello tenía que ir al lugar al que no había ido durante quince años, su antigua casa.

Un par de cuadras más adelante un acogedor edificio de cinco pisos estuvo delante de él, bajo de su auto con paso temeroso para luego caminar lentamente, mientras la lluvia empapaba el elegante traje que traía puesto, hasta la entrada.

Ese sitio estaba lleno de recuerdos de él y Mingyu, desde felices hasta tristes, no había nada que ese lugar o más específicamente el segundo piso, donde ellos habían vivido, no haya visto. Miro todo a su alrededor, las cosas parecían igual que siempre, desde la casa del lado con ese horrible color verde hasta el extraño mural de propaganda política, en el único muro, del terreno abandonado a unas casas de su edificio.

En todos estos años, muchas gente le había hecho propuestas para comprar el departamento de aquel edificio azul. Pero la realidad era primero, que no quería venderlo, ese lugar era como una extraña isla de recuerdos y él no quería deshacerse de ella, y segundo, no podía venderlo porque legalmente el sitio le pertenecía a Mingyu, y sin la firma de él no sé podía vender.

Rebuscó entre los bolsillos de su pantalón hasta sacar un gran manojo de llaves, entre las que estaban por su puesto las de ese edificio. Todos estos años las había puesto junto a sus otras llaves, tal vez con la esperanza que un día tuviera el suficiente valor para ir de nuevo y afrontar todo lo que ese lugar significaba.

El primer paso era abrir la reja, y fue el paso más fácil, entro al lugar y ninguna persona se percato de su presencia, el sitio seguía igual de silencioso que siempre, Wonwoo incluso juraba que el tiempo parecía haberse detenido en ese lugar. De pronto desde la puerta, donde en teoría vivía el recepcionista, un joven de cabellera negra y mejillas regordetas sacó su cabeza por ella.

Te olvidaré [Meanie]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora