Te olvidaré [Meanie]

Furioso

En una semana Kim Mingyu no había querido levantarse de su cama. Para él, su vida era un desastre total. Pues primero, su padre había fallecido y luego su novia lo había dejado.

Y en todo ese proceso él dejo de ir a la universidad, así que en ese punto tampoco estaba bien.

—Ya me cansé, Kim Mingyu.

El amigo de toda la vida de Mingyu, Jeon Wonwoo, había entrado estrepitosamente a su habitación.

Se conocían desde niños, pues habían estudiado siempre juntos en la primaria, secundaria, preparatoria y ahora en la universidad.

Aunque, actualmente, se encontraban en diferentes carreras. Mientras Mingyu estudiaba medicina, Wonwoo estudiaba derecho. Además como asistían a la misma universidad habían decidido vivir juntos.

—Levántate ahora mismo de esa cama —Wonwoo estaba llevando una lucha para quitarle las sábanas de encima.

—No quiero Wonu, dejamé —decía aferrándose a su edredón.

—Te deje una semana para que asimilaras los hechos —decía por fin quitándole las sábanas—, ya es hora que enfrentes la realidad.

—¿Qué tipo de realidad quieres que enfrente? —Mingyu se levanto de pronto de la cama— ¿Qué mi padre murió?¿Qué Solji me dejo?

—El fallecimiento de tu padre es lamentable, pero él hubiera querido que sigas adelante —dijo el tratando de ponerse a su altura— En cuanto a Solji, no tengo nada bueno que decir de ella.

Mingyu lo agarro de su camisa y se acercó, tanto así que sus frentes chocaban, estaba furioso.

—¿De qué hablas?

—Ella nunca fue sincera contigo, eso digo.

—Solji, ¡Ella era magnifica!

—No, no lo es.

Wonwoo lo empujó y trato de salir por la puerta, el moreno estaba siendo irracional e injusto con él.

—Sé claro, Wonwoo. Y sí me quieres decir algo, dímelo —dijo Mingyu cerrándole el paso— ¿Qué sabes de Solji?¿Qué yo no sé?

—Nada —intento salir por un lado.

—Ahora mismo, me vas a decir lo que sabes —lo agarro del brazo y lo puso contra la pared.

—No te diré nada.

—¡Dímelo! —golpeo su mano contra la pared.

—¿Pretendes golpearme o qué? —lo miro estupefacto.

—Claro que no, Wonu —bajo su brazo.

Soltó el brazo por el que sostenía a Wonwoo y se dejo caer encima de su hombro, apoyando todo su cuerpo en él. El de ojos afilados,   lo rodeo con sus brazos y Mingyu comenzó a llorar.

—Lo siento, Wonu. Nunca te haría daño —dijo mientras lloraba en su hombro— Yo te quiero, no me atrevería a tocarte.

—Lo sé —comenzó a acariciar su cabeza.

—Eres una de las personas más importantes en mi vida —acuno el rostro de Wonwoo con su mano.

—Lo sé, Min —acaricio su cara como si se tratara de un bebé.

El más alto se alejo con cuidado de él y se sentó en su cama, suspiro y pensó en sus acciones de hace apenas unos minutos mientras se tomaba del rostro.

—Estoy un poco alterado. Lo siento, siempre recibes toda mi mierda.

—Está bien —se sentó junto a él —, siempre estaré para ti.