"No me sigas princesa que te puedes quemar-Le susurró él al oído.
Ella lo observa, una gota de sudor frió se desliza por el costado de su rostro.... su cuerpo se estremeció."
¿Ellos porque son tan parecidos?, ¿Porque tienen poderes y cambios similar...
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No era la única con poderes, entonces ¿Cuantas personas los tienen? ¿Acaso no soy humana, sino otro ser distinto?, el hecho de ver como le crecieron las uñas de un momento a otro a Rita me ponía los nervios de punta.
Baje mi vista a mis manos, cerré los ojos, para luego intentar lo mismo que hizo ella, pero todo fue en vano. No logre ni un milímetro de crecimiento en mis uñas.
—No entiendo porque no puedo hacer lo mismo que ella—Dije entre susurros.
—Porque simplemente no eres como ella—Dijo una voz gruesa a mi espalda, gire mi vista para ver de quien se trataba.
—¿Quien eres?—Entre cruce las cejas.
—Acaso no te acuerdas, soy uno de tus compañeros de trabajo con Jack—Levanto las manos dando señal de que era algo obvio.
—Verdad... se me había olvidado-Una sonrisa tímida se dibujo en mi rostro.
—Yo fui el que te llevo a tu casa, pero no tienes que agradecerme ahora princesa, eso después- Me guiño un ojo.
—En serio...-Pase una mano por mi cabello-Gracias...—Nuevamente una sonrisa tímida se dibujo en mi rostro acompañada de mis mejillas encendidas en un rojo cremoso.
—Me lo agradeces luego princesa-Siguió su camino para luego posar su mano en mi hombro y despedirse. Mi vista estaba clavada en el, la luz de la luna le iluminaba su cabello, haciendo que varios de sus cabellos destellaran en un rojizo intenso.
—¿Como era tu nombre?—Detuvo su camino, para luego girar su rostro aun iluminado por la luna, sus ojos se resaltaron tanto que quede hipnotizada por lo bellos que eran.
—Ji...Jianna—Porque estoy tartamudeando, acaso me enamore de el... No eso no esta pasando.
—Lindo nombre. El mio es Adrien, espero nos veamos pronto—Siguió su camino nuevamente.
Moví mi rostro de lado a lado con el fin seguir mi camino, y no quedarme como una acosadora mirándolo hasta que la oscuridad lo desapareciera.
Abrace mi cuerpo con mis brazos, para luego seguir mi camino.
En aproximadamente veinte minutos llegue a mi casa, mis padres no se encontraban.. Probablemente mientras viva aquí no vea a mis padres con la misma frecuencia que en mi anterior hogar.
Me recosté en mi cama, estire mi brazo en dirección a una flor artificial ubicada en la mesa. La atraje hacia mi con un movimiento rápido, para luego comenzar a juguetear con ella.
El silencio abordaba toda la casa, cada vez se oscurecía mas. Después de unos minutos el cántico de los búhos me acompaño interrumpiendo el silencio que se abordaba anteriormente, me senté en la cama para asomarme por ventana y poder observar las estrellas, entre cerré los ojos para poder ver con mas claridad un destello rojizo a lo lejos.
