De repente, las caras de sorpresa y tristeza se apoderan de la conversación.
-¿Qué?-exclama Tiffy sorprendida.- ¿Por qué? Ese es el problema. El por qué. No vuelvo por mudarme a D.F., ni por que eche de menos a mi familia, ni mucho menos por mis pequeñas amistades. Me voy por él. No soporto estar a su lado sin besarlo, sin poder decir tonterías por doquier... Sin ser suya. Besarlo se ha convertido en una necesidad y ahora mismo, es un pecado muy tentador, no estoy dispuesta a caer. Me ha pedido tiempo y se lo voy a dar. No me puedo arriesgar a que el deseo se apodere de mí y le pierda para siempre. Supongo que cuando ellos vuelvan a México yo ya estaré en el D.F., solamente tendré que verlo en la boda. -Joder, Manuel en traje debe de ser jodidamente sexy.-piensa mi lado pervertido.
-Me voy para hacer la mudanza. Tengo que mudarme al D.F. antes del mes que viene.-miento.- Cuando antes empiece a hacer las maletas, antes acabaré. Además, aún tengo que ir a ver el piso, y a una reunión en la Universidad. Todos asienten, comprendiéndome. Menos Manuel, él sabe perfectamente el verdadero por qué, más bien el por quién. Me mira con enfado y niega lentamente evitando que los demás noten que nos estamos transmitiendo miles de cosas con solo mirarnos. -Vamos chicos, no lo tomen tan mal.-digo evitando su mirada.- No voy a perderme nada. Falta menos de medio mes para que ustedes vuelvan.
-Ya, pero este era nuestro, posiblemente, último verano juntos. Prácticamente ya tenemos todos nuestra vida planeada. Y no es juntos.-Dice Isa.
-Después de la boda, es posible que no volvamos a vernos dos días seguidos.-Dice José Manuel.-Ni si quiera a tí, Mayte. Todos asentimos, sabiendo que tienen toda la razón. Yo me voy al D.F., Isa y José Manuel seguramente quieran irse a vivir a otro sitio, Tiffy se va a Inglaterra, Manuel y Regi se quedan en Tijuana. Nuestra Tijuana. No se imaginan cuánto los envidio. Sé que estudiar fuera es una oportunidad que muy pocos pueden permitirse, y debería estar brincando de felicidad, pero alejarse de la familia, de tus amigos, de tu tierra, de tu vida... es más difícil de lo que parece.
-¿Cuándo te vas?-me pregunta Manuel.
-Mañana.
-¡¿Mañana?!-responden todos al unísono. Yo me limito a asentir y morderme el labio, culpable de no haber sido capaz de decírselo antes. Tampoco es que lo haya decidido con mucho tiempo de antelación... Esta mañana cuando he hablado con mi madre, se me ha pasado la idea por la cabeza y después de pensarlo mucho, he buscado un vuelo lo antes posible.
-Eso significa que esta noche hay fiesta de despedida, ¿No?-Dice pícramente Regi. Todos sonreímos pícaramente, sabiendo que esta noche, puede ser (va a ser) la mejor noche de todas las vacaciones.
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-¿Qué te vas a poner esta noche?-me pregunta Tiffy desde el cuarto de baño de su habitación. Sí, sigo durmiendo con ellas. Aún no he tenido el valor suficiente para ir a la mía. Todo sería...¿Incómodo?
-No lo sé.-admito.
-Algo sexy.-Dice Regi. ¿La picardía no se le va a ir nunca? Por favor, que ya no tenemos quince años. La etapa de las hormonas la pasamos hace un tiempo. Está loca, lo sé, pero es mi loca y no la cambiaría por nada del mundo. Yo me limito a sonreír y a negar con la cabeza.
-Regi, ¿Puedes ir a la habitación de Isa a por el delineador, por favor?-dice Tiffy saliendo del cuarto de baño.
Después de una pequeña discusión, Tiffy se sale con la suya y Regi acepta a regañadientes. Tiffy se sienta a mi lado y contemplamos como Regi desaparece por la puerta de la habitación. -Te vas por Manuel.-Afirma seriamente justo cuando escuchamos el sonido de la puerta.
-No.-miento.-Tengo que mudarme y ir a D.F. un par de ve..
-No me mientas más.-Me interrumpe señalándome con el dedo índice.
