-O-

47 3 0
                                    

Ojalá no te vallas.

Lo pensé. No quiero que te vallas por segunda vez. Por fin he podido ver lo que realmente eres.

Eres de color canela. Eres de rostro perfilado y hermoso. Eres de las personas que tienen corazón pero tristemente no motivos. Eres de las personas que le faltan razón pero crean encantos. Eres bella pero tienes miedo de ser demasiado bella y llegues a opacar a otros. Eres de las que aman sin piedad y eso las convierte en piedras. Eres de las noches estrelladas, la única estrella que resalta. Eres la musa que me entrega inspiración cuando ninguna otra musa se acerca a mi mente. Eres quien me toca en mis sueños y me hace sentir paz, amor y todo lo bueno y lo malo. Eres quien me enamora, Saturno, eres bella en mente y alma. Eres quien arrebató con todos mis instintos, ya no valgo por mi. Eres de las más calladas que tienen mucho que decir. Eres de la que lloran por odio y hasta lloran por estar felices. Eres de las tímidas que no se hacercan al risco por miedo a caer. Eres el temor de la Tierra. Eres de las que se niegan en volver después de haberse ido. Eres Saturno, Saturno. Eres vida que quitas, que das. Eres quien entrega todo y que al mismo tiempo no da nada. Eres ella. Eres de quien me he enamorado tantas veces y aún sigo esperando. Eres de quien he escrito millones de cartas y aún así no he recibido respuesta. Eres quien he dudado existencia. Eres quien la Tierra llora y que el tiempo llama. Eres quien ya sólo le falta una Luna de llegada. Eres quien tiene poco tiempo y aún así, espero. Eres los errores ortográficos en mis cartas. Eres las letras que escribo en mis versos, cortos y largos. Eres los sueños ya dichos en las fantasías de media noche. Eres incapaz de olvidarme por eso estas triste y nerviosa de volver. Eres Saturno, domadora de leones salvajes. Eres vivaz en sentimientos pero muerta en actos. Eres la obra más vista en el teatro pero no eres nada para el público, más para mi lo eres todo. Eres quien no sabe lo que es. Eres de quien dudaba pero ahora ya no dudó. Eres tu la que tiene sueño y aún no quiere dormir. Eres un fantasma al que temo ver pero aún así, mis ojos desean mirarte. Eres el final del párrafo, Saturno.

Descubrí mucho en tan sólo días escribiéndote. Como cuando las personas se levantan sin motivo alguno de su día. Como cuando ya a las siete y cuarenta y cuatro de la mañana ya hay un extraño en mi casa un día antes de fin de año. Como cuando sufres por que no te escuchan pero notas que no has hablado. Eres quien eres y no lo puedes cambiar, no lo puedes negar. Eres el color negro que tristemente muchos aman y pocos odian. Admitelo, te gusta ser el negro de los trajes de gala. Te has cansado de ver el mismo rostro todas estas semanas. Admitelo, lloraste cada vez que te levantabas por que no lo podías decir, no podías hablar. Aún sigues teniendo miedo de como vallan a reaccionar. Escuchas risas que no las causas tu. Sabes que ya tu familia te ignora y que te odia. Intentas cambiar quien eres pero sólo terminas llorando mientras escribes. Cierto, algunas de las descripciones soy yo. Niego la idea de que seas tu, puesto que dudo si pasas por eso.

Recuerdo que me puse un límite de seiscientas palabras en esta carta. Ya lo he logrado. Pero sigo escribiendo pensando que no notarás lo lejos que he llegado. No quiero que me odies puesto siempre terminas haciéndolo. Me siguen contando que lees lo que escribo y no has contestado. Que sigues llorando pero aún no se porque. Siento que ya no soy yo quien habla sino mi corazón que es el único que está a tu lado. Estas lejos Saturno, lejos. Mis letras son lentas al escribirse. Son lentas como el tiempo al llegar a la última Luna de tu tiempo, del que te he dado, el que la Tierra ya no aguanta.

Dos noches mas, no dos lunas. Quizás en estas próximas dos noches, quizás en una de estas dos noches, ya no halla sol que salga...

Letras a Saturno©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora