Lo siguiente que recuerdo es que me desperté en mi habitación, en la cama con aquellas sabanas blancas. Cuando recordé lo que había pasado la noche anterior no pude evitar sonreir. Quien se habría imaginado que en aquel lugar habría alguien como él. Al menos no parecía que estuviera loco, en realidad no sabía porque estaba allí.
Me levanté y fui al baño a darme una ducha, cuando salí ya con la ropa puesta vi una nota bajo la puerta, y sonreí, ya las notas bajo la puerta parecían costumbre, en realidad no era algo que me molestara, todo lo contrario, me gustaba porque era algo bonito ¿no?.
Me agaché para recoger la nota y efectivamente esta no estsaba en blanco, sino que había escrito lo siguiente:
"Gracias por pasar conmigo la noche, te quedaste dormida en el cesped, así que te traje a tu habitación."
Definitivamente creo que de todas las notas esa era mi favorita, creo que era la primera vez que alguien me daba las gracias por algo, entonces recordé un momento de aquella noche, su risa, aquella risa que de verdad me gustó, espera, no, no y no, no he podido pensar eso, bueno, solo es una risa, tampoco es para tanto, simplemente me gustaba esa risa, nada más.
Me di cuenta de que el sabía mi habitación, pero yo no sabía la suya, tenía varias opciones, podía pasar de averiguarlo, podía salir y tocar a las puertas o podía preguntárselo, pero no, no me lo diría nunca. La mejor opción era tocar en las puertas, sin duda, era una locura, pero cuando llegué me pareció que todas las habitaciones estaban desocupadas, así que...solo habría una en la que abrirían la puerta.
Así que sí, fue en busca de la puerta tras la cual Alec se encontraba, no sabía por donde empezar así que estuve un rato mirando las puertas pensando en cual tocar primero.
Decidí finalmente que era mejor no hacerlo, no quería molestarle y en realidad no era tan importante así que dejé el tema de la habitación a un lado, para centrarme en cosas más importantes...
De repente sonó el móvil, un mensaje, que extraño, nadie me enviaba mensajes, y nadie sabía mi número, volví a mi habitación y saque el móvil tras cerrar la puerta. Que extraño, era un número desconocido, me senté encima de la cama y abrí el mensaje, pero no era para nada lo que esperaba ver escrito, en realidad, no sabía que esperaba...solo que lo que leí en aquel momento me dejó completamente destruida.
Yo solo quería huir de aquello. Huir de todo y pensé que al ser verano todo acabaría, me equivoqué, todo sigue, recuerdo que en un momento dado se me cayó el móvil de las manos acabando sobre la cama, con las manos en mi cara, intentando dejar de llorar. El mensaje seguía abierto en la pantalla del móvil y en el se podía leer claramente.
"¿Sigues viva? Es una lástima, yo pensaba que al fin tenía una buena noticia..."
