Esperar por lo que está tan lejos,
Carta 1
Por: Luna
Que difícil es sentarse a esperar a que llegues, y nunca llegas,
se me va la vida en suspiros y delirios.
Todo el universo quisiera tener la fortaleza que tienes tú,
la belleza que te acompaña en el andar de tu vida,
y el amor que solo tú sabes dar a todos, pero solo quisiera que fuera mío.
Dicen que mirarte fijamente hace daño,
me imagino que abrazarte y besarte será un reto,
pero hasta la estrella más débil cogería el riesgo.
Te pienso todo el día y te espero toda la noche,
hasta el amanecer, que pocas veces te puedo ver.
Solo suspiro y anhelo el secreto de tenerte,
acariciarte, besarte y que te quedes en mí,
por los siglos que les queden a nuestras vidas.
Porque entre la oscuridad y las estrellas la única que te ha tenido he sido yo
y es algo imposible de callar.
En ese momento, que de lejos me mirabas
y con tus manos llenas de fuego me tocabas, me quemabas el alma.
Me dejaste con ganas de que nunca acabará,
que ese calor que sentía en mí, nunca cesara.
Eres diferente, hermoso, espléndido, seductor y difícil de entender.
Haces a muchas sudar con tu ternura,
eres tan amoroso que a veces algunas desean que no existieras,
pero como quisiera yo, esconderme detrás de una nube,
y durante la lluvia besarte como nunca nadie lo ha logrado.
Sé que nunca te voy a entender, y el día que llegue a ti, el mundo no resistirá,
pero aunque nunca te podre tener te amaré hasta el final,
hasta que Dios me mande a callar,
y pensar que los dos somos los dueños de la claridad y la oscuridad,
hacemos un balance en la humanidad.
Pero en mi corazón, el balance no existe, es casi todo oscuridad,
y te necesito a ti para que me des paz y la luz que requiero para mi andar,
pero que difícil esperar por algo que está tan lejos.
Desde la oscuridad te escribo, anhelando que en un eclipse de amor
se cumplan todos mis deseos y que mis anhelos no se queden en sueños.
Para: El Sol
De: La Luna
7/diciembre/2011
