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CLARISA

Al principio empezamos divertidos soltando risitas pero luego terminamos conmigo nerviosa y con el serio mientras yo intento cortar un tomate.

-¡TIENES QUE ESTAR BROMEANDO! -Grita furioso tomando mi brazo y haciendonme sentar en la silla.

-Lo siento -Lloriqueo.

-¿QUIEN DEMONIOS SE CORTA EL CODO CORTANDO TOMATES?

-Lo siento, Adam -Repito avergonzada -Puedo volver a intentarlo...

-No. Olvidalo -Me interrumpe -Terminaste con todas las vendas.

-Pero...

-Dije que no, Clarisa. Terminamos por hoy -Se queja.

Miro la caja y veo que tiene razon lo que hace que me sonroje. Lo miro avergonzada y me encuentro con su hermosa sonrisa: quiero besarlo. Adam niega divertido como si leyera mis pensamientos.

-Todavia no, Clarisa -Dice -Aun tienes diecisite.

No se por que siento que el sabe la verdad. Tomo la caja y me concentro en ella como si fuera interesante.

-No se por que dijiste eso -Murmuro.

-Por si no lo recordabas.

Dejo la caja sobre la mesa.

-Creo que el unico que tiene que recordar eso aqui eres tu -Me quejo volviendo la vista hacia el.

Adam levanta una ceja.

-¿Que?

-Eso. Tu eres el unico preocupado aqui por que yo tenga diecisiete -Niego -No te importa otra cosa.

-Debes estar bromeando.

-Estas tan preocupado en mi edad que ni siqueira me dices cuando me quitaras estas vendas. Lo unico que te importa es si tengo o no dieciocho o cuando los cumplire. -Estoy sonroja y ya me puse de pie -¡Quien demonios te dijo que yo queria besarte! ¡Yo jamas intente algo asi ni mostre intenciones de querer que nos besaramos!

El esta tan sorprendido que solo me mira. Ya no hay muestras de diversion en sus ojos y de repente la situacion me parece peligrosa.

-No tienes que decirlo para que se sepa.

-¡Claro que si!

Adam levanta una ceja.

-Pues dejame ser claro: eres demasiado obvia a veces.

-¡Pero jamas lo dije!

Ni siquiera se por que me esforzaba por negarlo cuando siempre me habian dicho que mis intenciones siempre fueron obvias. Incluso antes de ponerlas en practica la gente ya las prevenia.

El sonrio con frialdad: ¿por que siempre terminabamos asi? Si empezabamos bien terminabamos discutiendo o viceversa. Aunque claro yo siempre preferia que fuera como la ultima opcion.

-¿Que soy yo para ti? -Conclui.

¿Que demonios me sucede? Adam cruzo los brazos sobre el pecho.

-No lo se. Tu dime.

-¿Disculpa? 

-Deje muy en claro mis intenciones contigo. Lo que quiero de ti -Dio un paso hacia mi -Lo que me gustaria...

-No es verdad -Negue.

-¿No? -Pregunto -Creo que si pero si tu no lo entendiste no es mi culpa.

La manera en la que me mira me asusta. Trago saliva y aprieto los dientes para no empezar a balbucear cosas sin sentido como siempre. 

El es mioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora