Trozo de Tarta [JETI]

El amor de su vida

Jessica había terminado de hacer ejercicio cuando escucho que llamaron a la puerta. Si algo había aprendido de la buena Yuri, era que el desgaste físico siempre liberaba un poco de frustración y mantenía la mente ocupada.

Y vaya que estaba frustrada después del encuentro con Tiffany y Taeyeon.

Tomo una toalla y fue a ver quién estaba llamando a su puerta mientras e limpiaba el sudor. Pero cuando abrió la puerta no pudo creer lo que sus ojos estaban viendo. No pasaron ni dos segundos antes de que Tiffany se lanzará sobre ella besándola con desesperación.

Devoró sus labios con lujuria, con ansias, con dolor. Se quitó la chaqueta y la dejo caer al suelo. Jessica supo de inmediato que era el alcohol el que provocaba ese comportamiento en Tiffany.

Estaba completamente borracha.

— Espera Tiffany, estas borracha – Jessica la sujeto de las muñecas para detenerla apartándose de ella.

— Por favor Jess... lo necesito – Tiffany sonaba desesperada y parecía que empezaría a llorar. El corazón de Jessica no pudo soportarlo y ahora fue quien comenzó el beso. Los labios de Tiffany sabían gloriosos, durante mucho tiempo se privo de aquel delicioso placer y ahora no creía ser capaz de detenerse, pero se forzó a hacerlo, cortando de nuevo el beso de golpe.

— No Tiffany, esto no está bien. Tienes que irte – Tiffany detuvo sus caricias. Miró con intensidad a Jessica y comenzó a desnudarse. Jessica temblaba tratando con todas sus fuerzas de no lanzarse sobre ella y devorarla.

— Dame una noche Jessica – completamente desnuda, Tiffany se acercó a ella y comenzó a lamerle el cuello, erizando toda su piel. Tiffany sabía perfectamente que ese era uno de los puntos débiles de Jessica.

Dejándose llevar por la excitación terminaron sobre el sofá y mientras Tiffany recorría el cuerpo de Jessica con la lengua, aprovecho para quitarle el top y bajarle los pequeños short que usaba para ejercitarse. La piel de Jessica estaba llena de sudor, lo que la hacía un poco salada, pro a Tiffany le excitaba aún más, porque sabía que cada gota que lamia de su cuerpo, era parte de la esencia de Jessica.

Con el dedo medio, comenzó a acariciar la entrada de Jessica, haciéndola gemir de placer, beso su entrepierna y luego, con la punta de la lengua, toco su clítoris, provocando que arqueara la espalda. Ya estaba muy mojada. Jessica estaba a punto de explotar, deseosa de tener más de Tiffany dentro de ella. Tiffany era su platillo favorito y hacia mucho que se le anhelaba.

Un sueño inalcanzable.

Tiffany mordisqueo el clítoris de Jessica haciéndola temblar. Con agilidad, Jessica le dio la vuelta y la coloco sobre el sofá, abrió sus piernas y se quedó observándola por un rato. Tiffany estaba igual de mojada y su entrada estaba dilatada. Jessica sabía lo que debía hacer, quería probar aquel jugo sagrado, quería sentir su intimidad húmeda entre sus labios. Pero no debía de hacerlo. Tiffany no podía estar allí, era peligroso.

Se inclinó sobre ella y lamio sus duros pezones jugueteo con ellos y luego se detuvo solo para volver a besarla. No podía hacer esto, no debía hacerlo.

— ¿Por qué te detienes? – pregunto Tiffany impaciente.

— Si seguimos con esto... me odiaras mañana más de lo que ya me odias — Tiffany se sentó acercándose a sus labios. Le rodeo el cuello con los brazos y se dejó caer en el sofá, jalando a Jessica volviendo a besarla.

— Esta noche solo piensa en que sin importar todo lo que te dije, te amo — susurro mordiéndole el labio.

— ¿Qué hay de Taeyeon?

— Solo estamos tú y yo. Todo lo demás, no importa — Tiffany metió un dedo en la vagina de Jessica y comenzó a moverse en su interior.

Sabía que al siguiente día se desataría el infierno, pero con tal de probar la gloria, estaba dispuesta a afrontar las consecuencias de tener sexo aquella noche con el amor de su vida.