Shiota Nagisa, un chico de 17 años, es transferido a un prestigioso internado.
El problema de nuestra protagonista, es que tiene que hacerse pasar por una chica ya que son los deseos de su "dulce" madre.
Allí, hace nuevas amistades mientras intent...
¡Feliz Año Nuevo! (Sé que ya han pasado unos cuantos días, pero mejor tarde que nunca ¿no? Hehehe)
Siento mucho la tardanza, he conseguido un trabajo de medio tiempo para las horas que no tengo clases y no he tenido tiempo de escribir ^.^u Y bueno, he aprovechado estas navidades para descansar y vaguear XD
Pero aquí os dejo el nuevo capítulo recién hecho (aun esta calentito hahaha)
Sé que en el capítulo anterior deje a Karma con mala imagen, pero tranquil@s, en este capítulo lo volveréis a amar (aunque creo que en ningún momento lo dejasteis de hacer, pero weno ^.^)
Cierro fuertemente los ojos, no quiero ver su expresión. Debe pensar que soy una "niña" tonta. Pero todo es mi culpa, después de todo, soy el único que se emocionaría por un "beso" como aquel. Creo que si... todavía soy un niño...
- No considero lo de ayer como un beso. – dice él, con un rostro serio.
Sus palabras, se clavan como dagas en mi corazón. Triste, intento zafarme de su agarre, pero me es difícil ya que él es mucho más fuerte que yo. Las lágrimas se acumulan en mis ojos, pero no quiero derramarlas. Después de todo, aún tengo orgullo.
- Eso solo fue un roce de labios, solo los niños de cinco años lo considerarían un beso. – otras duras palabras que se clavan en mi interior sin piedad.
Ya no quiero oír nada más. Solo quiero irme lejos de aquí.
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- Eso no fue un beso... – volvió a repetir –... esto lo es.
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De repente, Karma-sensei levanta mi rostro bruscamente con la ayuda de su mano, la cual está debajo mi barbilla. Acerca peligrosamente su rostro y junta sus labios con los míos. Mi mente esta en blanco. Demoro largos segundos en descifrar lo que está sucediendo. Entretanto, él, aprovecha mi estado de inmovilidad y mueve sus labios encima de los míos. Al sentir esto, despierto de mi letargo. La vergüenza invade mi cuerpo e intento separarme pero me es imposible, es mucho más fuerte que yo.
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