Una nueva vida AkaFuri

¡No!

En mi hora de comida lo estuve editando.
Espero les guste.

Faltaba una semana exacta para su boda, una semana para cumplir dos meses desde la desaparición de Kōki. No había rastro alguno de él y la policía había dejado de buscarlo porqué Kōki así se los pidió.

Todo había comenzado 3 días después de su aniversario de novios.

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—Me mando a llamar, padre— dijo entrando al despacho de su padre.

—Sí, toma asiento— ordenó y así lo hizo —. Dentro de 4 meses te casaras con Emi Onodera.

—¿Qué? No lo haré— respondió levándose.

—Siéntate— Seijūrō lo hizo — Te casaras o mataré a Furihata Kōki.

Seijūrō quedó atónito por la amenaza —No te atreverías.

—Claro que lo haré, podía ser un asalto, secuestro o lo peor para él, ser violado por desconocidos y luego matarlo... Tú decides Seijūrō— dijo Masaomi cruzado de brazos.

—yo....está bien— dijo apretando los puños.

—Bien. No tienes permitido decirle a Furihata, tus amigos y compañeros la razón de tú boda. Tus salidas serán controladas y monitorizadas hasta que lo dejes, para ello tienes dos meses para irte alejando de él. Piensa que así evitarás hacerle un daño mayor— dijo triunfante.

—Si padre.

—Tú teléfono.

Renuente entregó el teléfono y salió del despacho. Llegó a su habitación y la destrozó toda. Fue cuando lo notó, el sentimiento del despertar del otro Akashi, estaba furioso por ser separado de Kōki.

Los dos meses pasaron y no sabía cómo decirle a Kōki sin lastimarlo, No podía salir de la casa sin vigilancia, ni usar los teléfonos o computadora para avisarle a Kōki. Pero todo colapso cuando lo vio en su casa, Kōki estaba profundamente lastimado.
Ese mismo día su padre le regresó el teléfono, pero por más que llamaba a su novio no respondía.

El día que Kuroko le habló para informarle de la desaparición de Kōki. Él otro Seijūrō despertó, su sed de venganza contra su padre nació y se vio reflejado a veces en su compartimiento y el destello dorado que a veces tenía su ojo rojo.

Ese sábado de la llamada de Kōki lo dejó muy inquieto, uno era el hecho de lo mal y dolido que se escuchaba dolido y el otro, era el hecho de que estaba con alguien.