"Lo que siento por ti"

"Cuarta Pieza"

El día estaba muy tranquilo, el sol se estaba poniendo y acababa de terminarse el cono de helado que había comprado, el cual por cierto estaba delicioso. Sabía que debía confiar en el buen juicio de Serena para con la comida, por algo cocinaba tan bien.

Miró a la chica a su lado, se notaba muy incómoda ¿No le agradaría estar con él? Se sintió un poco culpable por haberla hecho venir hasta aquí si no quería, y solo por un capricho suyo. 

Bueno, él le había dado la opción de no acompañarlo y ella la había rechazado, así que debía sentirse tranquilo.

¿Aunque quizás solo lo hizo por cortesía?

—¿T-te divertiste? —la oyó decir.

—¡Si claro Serena, el helado estuvo delicioso! ¡Gracias por invitarme! —exclamó alegre.

—Me alegra, ¡yo también la pasé bien! —Bien, eso aclaraba la duda anterior. Así que ya no tenia de que preocuparse.

Por ahora su dilema debía ser su siguiente batalla de gimnasio ¿Qué tipo de estrategia debería usar? Bueno, no es que ese fuera su fuerte, pero de alguna manera algo premeditado tenía que tener...

—Ash ¿Pu-puedo hacerte una pregunta? —la chica habló sacándolo de sus pensamientos, hizo un esfuerzo para dejarlos de lado y concentrarse en ella.

—Claro Serena ¿Qué pasa? —la vio temblar un poco, ¿a caso tendría frío?

—Me preguntaba si tú qui-quisieras ser mi pareja e ir al ba-baile conmigo... —habló de forma muy nerviosa.

Se sorprendió por lo que escuchó, ese tipo de pregunta si que no se la esperaba ¿Le estaba preguntando si él quisiera ir al baile? Si era sincero...no, no tenía deseos de eso. Prefería miles de veces estar entrenando a ir a ese tipo de eventos.

Pero ¿por qué se lo preguntó a él? Sabía muy bien que Serena tenía muchos deseos de asistir, pero ¿Por qué con él? Ella conocía su poca afinidad y gusto por éste tipo de cosas, más aún así se lo pregunta.

Una idea cruzó por su cabeza: ¿Seguiría sintiéndose culpable?. Tenía bastante sentido, quizás ella aún se sentía mal por lo que pasó en la tarde y de alguna forma quería reivindicarse. Esto del helado es una clara prueba de ello. Pero el no sentía que ella debía hacerlo, es decir, le agradaba estar con ella, pero no de esa manera. Le gustaba cuando era más espontaneo, en un ambiente grato para ambos...como un entrenamiento.

No sabía realmente que responderle. Si decía que sí le estaría mintiendo, porque en realidad no tenía ganas de ir. Además, si es por bailar el tenía dos pies izquierdos, se la pasaría tropezando y Serena finalmente no se divertiría. Estaría mejor si bailaba con Bonnie así no tendría que cargar con él.

Pero más importante aún, ¡el no tenía tiempo para esas cosas! Debía entrenar muy duro para su próximo reto. No debía distraerse con cosas sin importancia como esas. ¿Con que desafíos se encontrará en el próximo gimnasio? Recordó escuchar a Clemont decir que el Líder utilizaba pokémon tipo psíquico... Si es así ¿a quién debería utilizar?

Desvió la mirada a un lado y vio que la chica lo miraba atentamente. En ese momento recordó su pensamiento inicial y que debía responder a su pregunta. Pero, ¿cómo tenía que decirlo? No era muy bueno para estas cosas. Balbuceo un rato, hasta que, finalmente, decidió ponerse serio y decirle su respuesta.

—Lo siento Serena, pero no me agrada esa idea.

La chica se tensó al oírlo, y el tiempo para ella se detuvo en ese mismo instante ¿Había escuchado bien? Ash, el chico más lindo y amable que había conocido, el que le hacía sentir cosas maravillosas con solo pensar en él y que con solo una pequeña sonrisa daba vueltas todo su mundo... ¿la había rechazado?