Mi bella perla

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Han pasado unos días desde mi accidente y me siento mejor de mis golpes, el dolor a disminuido considerablemente, he incluso ya empecé a moverme un poco más, ya me aburrí de guardo reposo, pero la señora Mei insiste en que lo haga.

Estoy muy contenta, por fin la pesadilla de trabajar en la joya a terminado, Sasuke sin duda ha sido tan lindo, ya que sé a ocupado de todo, él abogado a estado investigando y en unos días me reuniré con él.

Lo único malo es que Kakashi no ha dado señales de vida, ni a hecho nada y eso no es normal.

Pero hoy no es día para preocuparme, ya que invite a Sasuke a comer y ahora estoy preparando la comida un poco apurada, ya que se me hizo un poco tarde, por jugar con Naomi después de nuestro desayuno, escuchó el timbre sonar y..

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El que Hinata este mejor definitivamente me alegra mucho, aunque yo he estado muy ocupado, ya que el trabajo se incremento y no he podido estar con ellas como he querido, pero al terminar de preparar los avances para la junta con los socios de la compañía, puedo respirar tranquilo.

Definitivamente el contar con Jūgo me alegra. Le he contado un poco de Hinata y me ha hecho darme cuenta, que tal vez es hora de sentar cabeza y tal vez le haga caso.

Hoy estoy invitado a comer a casa de ella, así que tras terminar mi trabajo, voy en camino hacia allá. Ansió poder verla -al llegar- toco el timbre, la señora Mei abre la puerta y después de saludarme entro a casa y la veo salir de la cocina, al parecer a estado ocupada, Hinata limpia sus manos en su delantal y esa nueva faceta de ella me agrada, es una mujer dulce y hogareña como mi madre.

La saludo, ella me pide tomar asiento, Naomi se acerca y me pide jugar con ella y es algo raro, ya que nunca había pensado estar así con un niño, pero accedo y al jugar con ella hace que desee, tal vez tener un hijo.

—Al estar lista la comida, acomodo todo en el comedor— y al ir a llamarlos, veo que Sasuke y mi hija juegan, guardo ese recuerdo en mi memoria y les pido pasar al comedor. Siento a Naomi a mi lado, le daré de comer, la señora Mei nos cuenta que harán un hospital cerca de mi casa y eso es bueno y al probar mi guiso..

—Señor Uchiha, digame ¿Usted también es medico o enfermero cómo Hinata?

La comida esta muy rica y más al ser un guiso de tomate, ya que me gusta mucho, la platica es muy amena, pero la señora Mei me hace una pregunta que me toma por sorpresa, ya que no recordaba que Hinata les invento esa mentira..

No señora Mei, yo soy dueño de una empresa automotriz y por coincidencia «o el destino» fui a dar a ese hospital y ahí conocí a la enfermera más bonita y la mejor del mundo diría yo, veo a Hinata que se sonroja y..

—¡Oh que bien! Hinata siempre ha ayudado a los vecinos en lo que puede y aparte de bonita es una buena chica, la mejor como dice..

No lo dude y al sonreír..

—Lo bueno es que la señora Mei no noto ese doble sentido en las palabras de Sasuke— terminamos de comer, platicamos un poco más. Sasuke se despide de nosotras, dándonos un beso a cada una, vamos a recoger la cocina y al terminar, voy a recostarme un poco y de pronto unas figuras llaman mi atención..